Cada vez son más conscientes en Ducati del regalo que le han hecho a Honda porque la fábrica de Borgo Panigale ha dejado escapar a un verdadero campeón. Gracias a su testarudez y a su confianza en sí mismo, Jorge Lorenzo ha sabido dar la vuelta a una situación que cada vez se antojaba más complicada y ha conseguido adaptar la GP18 a su estilo de pilotaje para brillar como antaño. El piloto español se ha exhibido en el caos provocado por la lluvia en Silverstone y ha conseguido su segunda pole con Ducati, tras la lograda en Montmeló esta misma temporada, al completar una vuelta perfecta que ha privado a su compañero de equipo de la primera posición. Andrea Dovizioso y Johann Zarco han completado la primera línea de la parrilla de salida del Gran Premio de Gran Bretaña, mientras que Marc Márquez ha finalizado quinto y mañana tomará la salida desde la segunda línea.
Con una hora de retraso sobre el horario previsto, debido a las condiciones de la pista y a la caída múltiple en el último entrenamiento libre de la jornada, ha comenzado una complicada sesión de clasificación en la que el asfalto estaba empapado en algunas zonas de la pista mientras que en otras permanecía seco cuando se aproximaban unas nubes amenazantes. Una situación delicada en la que todos los pilotos se han decantado por los neumáticos de lluvia, salvo el australiano Jack Miller.
Unas condiciones mixtas que han provocado que todos los pilotos salieran a la vez nada más abrirse el pit lane y que ha convertido la sesión de clasificación en un auténtico correcalles en el que hasta siete pilotos se han alternado en la primera posición a lo largo de los 15 minutos de la sesión.
Al final la pole ha sido para Lorenzo, que en su última vuelta lanzada ha conseguido desbancar a su compañero de equipo con un giro estratosférico. “He intentado enfriar un poco los neumáticos en alguna vuelta para tener un neumático bueno en la última y, la verdad, he empujado al máximo. He cometido algún error en alguna frenada. He frenado demasiado pronto y he perdido algunas décimas, pero por suerte he estado muy hábil en el último parcial y ahí creo que he marcado la diferencia para llevarme la pole por muy poco”, ha explicado Lorenzo, que suma su pole número 67 en el campeonato del mundo y la 41 en MotoGP.
La lluvia hizo acto de presencia en los compases finales del último entrenamiento libre y provocó que varios pilotos se cayeran en la curva 7 debido al agua acumulada en esa zona del trazado británico. Álex Rins, que superó la repesca y mañana tomará la salida desde la décima posición y por delante de las dos Yamaha oficiales, se tuvo que tirar en marcha de su Suzuki a unos 165 km/h para no impactar contra el muro, pero el peor parado fue Tito Rabat.
El piloto del equipo Reale Avintia sufre una fractura abierta de fémur, tibia y peroné en su pierna derecha después de que la Honda de Franco Morbidelli impactara contra él cuando se encontraba de pie sobre la grava tras caerse en esa misma zona de la pista. Rabat fue trasladado en helicóptero al hospital de Coventry después de ser sedado debido a lo doloroso de la grave lesión.