Fue en una reunión durante el pasado Gran Premio de Australia cuando Honda Racing Corporation (HRC) y Ducati pactaron los detalles del debut de Jorge Lorenzo con la marca del ala dorada en el circuito Ricardo Tormo de Cheste, en los test posteriores a la carrera que cerraba la temporada 2018. Un acuerdo por el que el piloto español, que tiene contrato con la fábrica de Borgo Panigale hasta el próximo 31 de diciembre, podría hacer declaraciones a los medios de comunicación siempre y cuando su comparecencia se produjera sin patrocinadores a su espalda y evitando hacer comparaciones entre ambas motos.
Unas condiciones que Honda aceptó, por lo que se esperaba que el piloto español hiciera declaraciones a la prensa sobre sus primeras impresiones sobre la RC213V. Al final no ha sido así y Jorge Lorenzo ha debutado en silencio con Honda para evitar problemas y posibles penalizaciones.
El mallorquín ha salido a rodar a las 12.56 horas y lo ha hecho con una montura totalmente negra, en la que la única nota de color la ha aportado su dorsal 99 en color rojo. En el mono, totalmente negro, sólo aparecía el fabricante Alpinestars, el suministrador de neumáticos Michelin y el logotipo con el que se identifica a Lorenzo: X fuera.
El nuevo piloto del equipo Repsol Honda ha completado 30 vueltas al circuito Ricardo Tormo de Cheste antes de que la lluvia hiciera acto de presencia una hora y media antes de la conclusión de la primera jornada de entrenamientos. Con un crono de 1:32.959, ha concluido en la decimoctava posición en un día dominado por Maverick Viñales (1:31.416) y en el que Marc Márquez se ha quedado a 0.302 del tiempo del piloto de Yamaha, que ha estrena su nuevo dorsal 12.