Tenía una espinita clavada en el circuito de Termas de Río Hondo después de los recuerdos amargos de la pasada temporada, cuando fue sancionado hasta en tres ocasiones en una caótica carrera que ganó Cal Crutchlow. Marc Márquez, que siempre ha mostrado una superioridad aplastante sobre el resto de sus rivales en el trazado argentino, estaba dispuesto a dejar atrás los sinsabores en una pista en la que ya había ganado en dos ocasiones (2014 y 2016). El ritmo mostrado este fin de semana en los entrenamientos quedó refrendado en una carrera que dominó de principio a fin y sin sobresaltos gracias a los casi 10 segundos de ventaja acumulados. El piloto del equipo Repsol Honda ha goleado en el Gran Premio de Argentina gracias a una victoria aplastante que le encarama al frente de la clasificación general de MotoGP y antes de que el Campeonato del Mundo aterrice dentro de dos semanas en Austin, que no conoce otro ganador de Márquez. Valentino Rossi, que superó a Andrea Dovizioso en la última vuelta, completaron el podio.

El vigente campeón del mundo de MotoGP, que arrancó desde al pole, emprendió el ataque desde la primera curva y al completar el primer giro ya contaba con un segundo y medio sobre sus rivales. Con un ritmo infernal fue aumentando su ventaja a razón de un segundo por vuelta y, aunque en tramo final de la carrera no apretó tanto, finalizó con casi 10 segundos de margen sobre Rossi y Dovizioso.

Por detrás y casi desde el inicio, los dos italianos se enzarzaron en una pelea por la segunda plaza que al final cayó del lado de Il Dottore el día exacto en el que se cumplían 23 años de su debut en el Campeonato del Mundo. A ellos se unieron Franco Morbidelli, Jack Miller y Cal Crutchlow, que fue sancionado con un ride through (paso por el pit lane) por adelantarse en la salida y quedó descartado con el consiguiente enfado del piloto británico.

Álex Rins, que tomó la salida muy retrasado, protagonizó una magnífica remontada que le llevó a la quinta posición después de que Rossi y Dovizioso cambiaran el ritmo y ya fuera imposible atraparlos.

Maverick Viñales, que partía desde la segunda posición de la parrilla, volvió a realizar una pésima salida y cayó hasta la octava plaza aunque no pudo acabar la carrera ya que en la última vuelta fue embestido por Morbidelli.

Jorge Lorenzo, undécimo, se vio obligado a remontar después de que en la salida cayera a las últimas plazas.