Jerez

Tras una primera campaña de aprendizaje plagada de lesiones que le llevaron a perderse cinco carreras, Álex Rins dio un significativo salto de calidad en 2018. El piloto español llegó a ser una de las revelaciones del año tras concluir quinto en la clasificación general en su segunda temporada en MotoGP y después de sumar cinco podios, de los que tres de ellos (Motegi, Sepang y Valencia) llegaron en las últimas cuatro carreras del año. Acabó en un estado de forma excepción que ha quedado refrendado al inicio de 2019, tras conseguir en Austin su primera victoria y pasar a abanderar el proyecto de Suzuki tras la llegada del rookie Joan Mir.

He visto la carrera unas cuantas veces, como cinco o seis. Fue genial, aunque al principio sufrimos un poco para seguir la rueda de Miller con el depósito lleno y neumáticos nuevos. Cuando los neumáticos se fueron desgastando, fui capaz de dar un paso hacia delante. Cuando estaba a un segundo y medio de Valentino, lo que se me pasaba por la cabeza era tirar”, ha recordado el piloto de la marca de la gran S en la conferencia de prensa del Gran Premio de España, que se disputa este fin de semana en el circuito de Jerez-Ángel Nieto.

Álex Rins, durante la conferencia de prensa del Gran Premio de España, en el circuito de Jerez. MotoGP

Tras la victoria en Austin pasó unos días de descanso en México junto a su novia, aprovechando las vacaciones de Semana Santa, y vuelta a la rutina en Andorra, donde fijó su residencia coincidiendo con su salto a MotoGP. Gimnasio, bicicleta y moto para preparar la carrera de Jerez. Tiempo de asueto con sus dos perros Olivia y Paco.

La vida no me ha cambiado en nada. Al final, es lo mismo. Mi sueño se ha hecho realidad, pero viene el siguiente circuito y la siguiente carrera. Ahora me ponen en las quinielas para luchar por el campeonato, pero yo me siento como siempre. Otros pilotos me ven como candidato al título, pero esa presión es positiva. Si me ven como candidato al título es porque estamos trabajando bien. Me siento preparado y tenemos una moto ganadora, así que vamos a hacerlo lo mejor que podamos”, razona Rins, al que su despiste habitual le ha llevado a perder el pasaporte en más de una ocasión o a extraviar las llaves de casa.