Con el arranque de la temporada de MotoGP a la vuelta de la esquina, que dará comienzo el próximo 10 de marzo en el circuito qatarí de Losail, el equipo Repsol Honda ha optado por un cambio de aires en su primer año sin Marc Márquez en las filas de la estructura más laureada del campeonato del mundo desde 2013 y que coincide con el 30º aniversario de la alianza entre la marca del ala dorada y Repsol. La primera presentación post Márquez ha comenzado con un cambio de escenario al habitual Campus Repsol, que se ha llevado a cabo en el Gran Teatro CaixaBank Príncipe Pío de Madrid.
El segundo cambio significativo es la decoración de la Honda RC213V, donde ganan peso el azul, blanco y rojo, los colores corporativos de Honda Racing Corporation (HRC), pero la revolución más importante está todavía por llegar porque el equipo Repsol Honda busca recuperar el trono perdido con una nueva moto competitiva que permita a Joan Mir y Luca Marini subir al podio.
“El test de Sepang fue muy interesante porque pudimos encontrar una dirección. La moto era diferente a la de Valencia, había mucho que probar y queda mucho por hacer. Todavía tenemos muchas cosas que mejorar, pero hemos dado un paso interesante. Tenemos unas concesiones para dar ese paso hacia delante y las tenemos que aprovechar de forma inteligente para volver donde le toca estar al Repsol Honda. Se ha rediseñado todo un poco. Había que mejorar temas de peso y de potencia. En la competición siempre hay que mejorar: los pilotos con su habilidad, los técnicos y la gente de Repsol con el nuevo combustible intentando llegar al máximo. Tenemos ilusión con dos pilotos jóvenes porque venimos de bastante abajo. Hemos puesto las bases para comenzar una recuperación real. Durante la primera parte de la temporada intentaremos reducir ese espacio y en la segunda mitad del año a a ver si podemos pelear por podios y victorias”, ha asegurado su team manager Alberto Puig.
Con Joan Mir convertido en la punta de lanza del proyecto, el piloto mallorquín ha heredado la estructura técnica de Marc Márquez, su denominado dream team con Santi Hernández a la cabeza. “La moto me encanta y estamos en un año de cambios. Están trabajando duro desde Japón y disfruté de los test de Sepang. Soy el primero que tiene ganas de sacar esta situación hacia delante y sienta bien empezar a ver la luz al final del túnel”, ha explicado Mir, en el año más decisivo de su carrera deportiva, como el propio piloto ha confesado.
Preguntado sobre cuánto pesa la sombra de Marc Márquez en el equipo, Mir ha sido tajante. “No he pensado en él en todo el año; es más lo que se habla fuera. Aquí el objetivo es estar en lo más alto más allá de quién haya estado aquí antes”.
Para Luca Marini todo es nuevo en el Repsol Honda. Se decidió a fichar por el equipo al ser una estructura oficial. Estoy muy centrado en mi trabajo y comienza una nueva era para mí y para Honda. Marc Márquez ha hecho historia con la marca del ala dorada y yo también quiero hacerla”, ha sentenciado el hermano de Valentino Rossi.