Tres carreras. Eso es lo que llevamos de temporada en MotoGP. Tres citas en las que Ducati sigue demostrando su dominio en la categoría, pero en la que también se ha encontrado rivales inesperados como Aprilia. Tres citas en las que el mundo del motociclismo ha sido testigo del renacer de un Marc Márquez que poco a poco llegando a su mejor versión.
La tarea de Márquez no es nada fácil. Después de más de una década a los mandos de una moto Honda, el piloto de Cerveza optó por hacer las maletas y probar una nueva experiencia en la categoría reina. Quería volver a disfrutar, no volver a ganar, pero ambas cosas pueden ir de la mano. Más aún en el piloto catalán.
De momento, su nueva etapa en Ducati, a manos de la Gresini, no está siendo fácil. Ha brillado por momentos, pero se nota que le falta algo de adaptación. En la primera prueba de la temporada, en Qatar, logró un meritorio cuarto puesto. En las dos siguientes se fue al suelo cuando peleaba en las posiciones de cabeza.
A pesar de ello en Ducati están contentos con Márquez y miran con atención la progresión de su piloto de cara al próximo Mundial. Quien sabe si en 2025 Márquez podrá vestir de rojo y pilotar la moto oficial de la marca italiana, clara dominadora del campeonato del mundo en los últimos tiempos.
Su duelo con Jorge Martín
En apenas dos meses de competición el mercado de pilotos de cara a 2025 ya está comenzando a moverse. Primero llegó la renovación de Quartararo con Yahama y después la de Pecco Bagnaia, vigente campeón del mundo, por Ducati. Ahora, con dos de las plazas más codiciadas cubiertas, muchos pilotos entran en una batalla por lograr un buen asiento.
No cabe duda de que Ducati es la marca más codiciada de MotoGP. Aunque no esté dominando como en 2023 en este arranque de campeonato, gracias al buen papel de la Aprilia de Maverick Viñales y de Aleix Espargaró o la KTM de Pedro Acosta y Brad Binder, cuenta con los dos primeros clasificados del Mundial y sitúa casi siempre a sus motos entre las diez mejores.
Por si fuera poco, cuenta con el piloto más laureado de la parrilla, como es Marc Márquez, con el campeón de los dos últimos años, Pecco Bagnaia, con el vigente subcampeón, Jorge Martín, con el tercero... Marco Bezzecchi. Y va a tener a la mayor promesa que llega por detrás, como es el murciano Fermín Aldeguer, el próximo año.
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Y sólo tiene cuatro motos 'oficiales', dos en el equipo oficial y otras dos en Pramac. La lucha por coger alguno de esos puestos es feroz y el único seguro para 2025 es Pecco Bagnaia. Martín ya ha dicho que o va a la oficial y viste de rojo o se va. Aunque quedarían pocos sitios donde ir si quiere pelear delante.
Bastianini pelea por mantener su puesto. Y Morbidelli, por ahora, sigue lastrado por su caída en pretemporada, pero mejorando en cada gran premio. Y por detrás llega el mejor, aunque también el menos adaptado a la Ducati, Marc Márquez, además de Álex Márquez, Bezzecchi o Fabio di Giannantonio.
Ducati tiene un año bastante complicado por delante, ya que tendrá que decidir a quién pone al otro lado de su campeón. O bien a Jorge Martín, quien se ha ganado su salto desde el Pramac, o bien apostar por la figura de una leyenda como Marc. Sea cual sea el elegido, sin duda que a Pecco no le gustará. Otra opción sería dejar escapar a ambos por no incomodar al italiano aún a riesgo de que la escuadra de Luigi Dall'Igna suelte a dos de los mejores de la parrilla después de haber creado la moto más puntera.
Opción lejos de Ducati
Lo que está claro es que Marc Márquez se plantea cambiar de moto la próxima temporada. Así lo ha dejado entrever en sus últimas declaraciones. "¿El futuro? No está claro, obviamente me gustaría una moto oficial. Para mí, todas las puertas están abiertas. La cosa es que, cuanto más rápido seas en la pista, más puertas se te abrirán. Ese es mi objetivo. Ahora mismo estoy en una posición diferente porque ahora estoy disfrutando, me siento competitivo y quiero seguir disfrutando de ello. Estoy abierto a escuchar a todos".
Si finalmente Márquez decide salir de lleno al mercado, las opciones no parecen tantas. La más clara sería su fichaje por KTM, el equipo que más hueco tiene para ofrecerle un proyecto de presente y de futuro. Sin embargo, todavía no es una opción que pueda garantizar una pelea por el título ni a corto ni a largo plazo.
Además, hay que recordar que dentro de la escuadra está el que parece que será la gran joya del futuro, Pedro Acosta. El de Mazarrón llega pisando fuerte y es difícil pensar que en 2025 no esté peleando por el título.