Una caída absurda, ya con el primer entrenamiento completado y tras un mal ensayo de salida en el que le patinó la rueda trasera en exceso, hizo que Pecco Bagnaia se fuera al suelo. El italiano se asustó cuando Maverick Viñales le superó por la izquierda, frenó instintivamente y se cayó. Ese contratiempo no supuso ningún problema para que el vigente campeón del mundo de MotoGP marcara el mejor crono (1:38.918) en la siguiente sesión y se clasificará directamente para la Q2.
El italiano no falla y mete presión a Jorge Martín, que con 24 puntos de ventaja sobre su rival puede proclamarse este fin de semana campeón del mundo de MotoGP en el Gran Premio de la Solidaridad de Barcelona, donde se celebra excepcionalmente la última cita de la temporada tras la DANA que arrasó la provincia de Valencia.
Sin importarle que varios pilotos siguieran su rueda, entre ellos Marc Márquez, el italiano tiró y se situó primero, seguido de su amigo Marco Bezzecchi mientras que Jorge Martín, quinto y a 0.296 de su rival, contó con la ayuda de su hermano Aleix Espargaró antes de un susto en la curva 5 que casi le lleva al suelo.
“Tengo 24 puntos de desventaja y lo único que puedo hacer es intentar ganar. Seguro que Jorge siente la presión, pero no lo veo nervioso. Me gustaría estar en la posición de Jorge, le envidio, pero es él quien tiene que hacer algo mal para que eso ocurra [remontar en la clasificación general]”, ha analizado Pecco Bagnaia, que ha recurrido a las construcciones de Lego para relajarse y evadirse de todo el ruido que genera la pelea final por el título de campeón del mundo de MotoGP.
El jueves por la tarde comenzó el Batmóvil de la serie clásica de TV (149,99 euros), que consta de 1.822 piezas, y dos horas después ya había completado el 75% de la construcción de bloques. “Es adictivo, cuando comienzas no puedes parar”, ha confesado entre risas.
La forma de relajarse de Jorge Martín es estar rodeado de sus padres Ángel y Susana, su hermano Javier y su novia María, su círculo de confianza. Todos ellos están presentes en el circuito de Barcelona-Cataluña para no perderse una cita histórica que el español creo que no va a ser capaz de cerrar este sábado.
“Confío más en la carrera del domingo. Este sábado creo que va a ser prácticamente imposible cerrar el título. No quiero precipitarme a cerrarlo antes de tiempo, provocar un error y liarla. Prefiero centrarme en la sesión de clasificación y, una vez lo haga, lo mismo encuentro una posición privilegiada o igual no. A partir de ahí, veremos qué hace falta para cerrarlo”, ha reflexionado el español tras una jornada en la que le ha faltado confianza.
“Cuando la tengo voy muy bien, pero cuando me falta un pelín de confianza yo creo que sufro más que en otra situación, porque me anticipo a tener una caída, a hacerme daño o cualquier cosa así. Entonces sí que puede afectarme un pelín más”, ha concluido Jorge Martín, que sólo necesita ser séptimo en las dos carreras para proclamarse campeón del mundo de MotoGP e inscribir su nombre junto a otros pilotos españoles como Álex Crivillé, Jorge Lorenzo, Marc Márquez y Joan Mir.