Hamilton insiste en entrar en MotoGP como propietario: tras fracasar con el Chelsea e invertir en la NFL, va a por KTM

Lewis Hamilton, siete veces campeón del Mundial de Fórmula 1, avanza hacia nuevos horizontes empresariales. Ahora, el piloto británico está en negociaciones con KTM para convertirse en inversor del equipo de MotoGP, un movimiento que podría ser clave para salvar a la escudería austriaca de la quiebra.

Según Pit Beirer, responsable de motorsport de KTM, las conversaciones ya están en marcha: "Ha habido contactos con representantes de Hamilton. No es un secreto que tiene interés en MotoGP y que está pensando en tener un equipo propio. Hemos tenido conversaciones muy interesantes", comentó días atrás al medio SpeedWeek.

El interés de Hamilton por MotoGP no es reciente. Este mismo año ya tanteó adquirir una participación en el equipo Gresini Racing. Sin embargo, la delicada situación económica de KTM ofrece ahora una nueva oportunidad para que el británico entre en el Mundial de motociclismo. La firma austriaca, conocida por su tradición en competiciones de motos, atraviesa una crisis financiera que la ha llevado a declarar insolvencia, acumulando deudas que ascienden a 1.800 millones de euros y poniendo en riesgo miles de empleos.

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KTM, que cuenta en sus filas con el joven talento español Pedro Acosta, enfrenta un panorama complicado. Aunque la marca asegura que su programa de MotoGP no se verá afectado, el apoyo de nuevos inversores podría ser crucial para garantizar su continuidad en la categoría reina.

La noticia de estas negociaciones no sorprende del todo, dado el historial de Hamilton como empresario. En 2022, el piloto británico se convirtió en accionista del grupo propietario de los Denver Broncos, equipo de la NFL. "Estoy interesado, como he dicho antes, en tener una participación. Los Broncos, por ejemplo, fue mi primer paso en ser dueño de un equipo y creo que en los próximos diez años habrá más", comentó Hamilton el pasado verano cuando apareció en la prensa su interés en Gresini.

Además, Hamilton intentó adquirir antes el Chelsea FC junto al empresario Martin Broughton, aunque la operación finalmente no se concretó y el club de fútbol inglés fue vendido a Todd Boehly por 4.971 millones de euros. Su capacidad para diversificar inversiones queda clara también con su participación en el equipo TeamX44, que compite en la categoría Extreme E, utilizando coches todoterreno eléctricos.

La crisis de KTM

Volviendo a KTM, la crisis que atraviesa el fabricante europeo ha obligado a la compañía a iniciar un procedimiento judicial de reestructuración. El grupo Pierer Industrie AG, al que pertenece KTM, busca saldar sus deudas y reorganizar sus operaciones para evitar la quiebra total. Este panorama financiero pone en peligro unos 3.600 empleos y ha llevado al despido de cientos de trabajadores, además de una pausa en la producción de motos de calle a principios de 2025.

No obstante, desde Mattighofen, sede de KTM, han reiterado su compromiso con MotoGP. Los pilotos Pedro Acosta, Brad Binder, Maverick Viñales y Enea Bastianini, que formarán parte del programa Tech 3 en 2025, tienen garantizada su continuidad en la competición, según diferentes aportes en prensa especializada. MotoGP no se toca... claro está, por ahora.

Lewis Hamilton, durante una prueba de exhibición con motos MotoGP

El interés de Hamilton por MotoGP quedó patente ya a mediados de este 2024, cuando surgieron rumores sobre su posible adquisición del equipo Gresini Racing. En el circuito de Assen hubo contactos iniciales, pero Nadia Padovani, propietaria del equipo, desestimó la oferta, indicando que no tenía intención de vender. La situación se tomó con humor en redes sociales, donde incluso bromeaban con que Padovani quería comprar la NASA.

Durante esas fechas, Hamilton fue cuestionado sobre estos rumores. "Siempre me ha gustado MotoGP. Estoy interesado en el crecimiento potencial del equipo, pero no he llegado tan lejos. Sin embargo, cualquier cosa es posible", comentó el piloto, quien en el pasado intercambió vehículos con Valentino Rossi, rodando con la Yamaha de MotoGP mientras Rossi probaba un monoplaza de F1.

Cristina Villarino

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La entrada de Hamilton en MotoGP no solo sería un impulso financiero para KTM, sino también una oportunidad para diversificar aún más su imagen como figura global del deporte. Con la experiencia adquirida en la NFL y otras inversiones, el piloto británico podría contribuir significativamente a la reestructuración y estabilidad de la marca austriaca, mientras continúa consolidando su faceta como empresario.

Para KTM, el objetivo principal ahora es alcanzar un acuerdo con los acreedores en un plazo máximo de 90 días, tiempo durante el cual la dirección actual mantendrá el control bajo supervisión judicial. Si bien el futuro del equipo de MotoGP parece asegurado por ahora, el respaldo de Hamilton podría marcar la diferencia entre una recuperación exitosa y un declive inevitable.