Jorge Martín, campeón del mundo de MotoGP en 2024, ha roto el silencio sobre las finanzas en su sector. A sus 26 años, el piloto madrileño ha dado varias entrevistas tras su histórica victoria. En un pódcast, ha abordado distintos aspectos de su trayectoria profesional, incluida su experiencia económica en las distintas categorías del Mundial de motociclismo.
En una entrevista para el podcast Tengo un Plan, el piloto de Aprilia compartió detalles sobre cuánto dinero ganan los pilotos en cada categoría. Según 'Martinator', "en Moto3 ya ganaba dinero". "Cuando subí al Mundial con contrato con Aspar, ganaba entre 30.000 y 40.000 euros más algún patrocinador. Con 17 años ganaba unos 70.000 euros. Hay otros pilotos, los buenos, que pueden estar ganando unos 150.000 euros, con todo. Aunque en Moto3, el 60 por ciento de los pilotos paga y el 40 por ciento gana algo", señaló.
Sobre Moto2, la categoría intermedia, el piloto de Aprillia explicó: "Diría que es al revés. El 60 por ciento de los pilotos gana dinero y entre el 30-40 por ciento sigue pagando por correr. Por una temporada de Moto2 puedes estar pagando entre 400.000 y 500.000 euros, o más. Por un año, es una pasada. Te estoy engañando porque no tengo ni idea, pero por ahí. Los que ganan dinero están alrededor de los 300.000 euros, que ya es dinero. Con estas cantidades puedes ahorrar y hacer otras cosas que te pueden dar tus ingresos".
El dinero en MotoGP
Al llegar a MotoGP, la categoría reina, el madrileño reveló que los ingresos son considerablemente mayores: "A MotoGP llegan muy pocos y llegas ganando menos, pero lo que quieres es llegar. ¡Gratis, ponme una moto! -dice entre risas-. En MotoGP la cosa va de los 600.000 o 700.000 euros a... no sé quién ganará más, pero ha habido años en los que se han ganado 12 millones de euros. Jorge Lorenzo, por ejemplo. Mucho dinero".
Durante la conversación, Martín también compartió un episodio personal que marcó un antes y un después en su vida. Tras ganar su primera carrera en Austria y encontrarse soltero, confesó que "se le fue de las manos". "Yo nunca había salido mucho, la verdad, pero empecé a bajar a Barcelona para ir de fiesta. Recuerdo que llegaba un domingo de carreras y me iba a Barcelona de fiesta. Volvía a entrenar a Andorra, y el fin de semana volvía a Barcelona de fiesta. Otra carrera, y así", explicó.
El piloto español narró cómo una noche, al recibir una factura en una discoteca, tuvo una revelación: "Llegó una cuenta, que no voy a decir cuánto fue, pero cuando la vi pensé, 'se te ha ido la olla, ¿qué haces aquí?'. La pagué, pero desde ese día hubo un cambio en mí. Ese no era yo. Volví un poco a mis raíces y pensé que eso no podía hacerlo. Ahí corté y se acabó". Poco después, conoció a María, su actual pareja, quien ha sido una figura clave para mantener su enfoque: "Eso me ha ayudado a mantener la cabeza. Pero es muy fácil perderte".