Ona Carbonell tuvo que visitar el hospital en Río de Janeiro este sábado tras sentirse un tanto mareada después de "competir bien" con el equipo de natación sincronizada en el Preolímpico, según informó la RFEN en una nota de prensa.
El mareo, descartado cualquier tipo de lesión interna tras realizársele un TAC, pudo venir motivado por un incidente sucedido horas antes. Y es que Carbonell se golpeó la cabeza con otra compañera al caerse mientras el equipo practicaba un salto durante los entrenamientos de este viernes. Sufrió un corte debido al percance.
"Esta mañana parecía que estaba bien, pero en el entrenamiento cada vez que se ponía boca abajo perdía totalmente la orientación", comentó la directora técnica de la RFEN, Ana Montero. "Ha competido sin ser consciente de lo que hacía, pero lo ha hecho bien", añadió.
Según los resultados de las pruebas, no hay síntomas de hematoma cerebral, pero la nadadora continúa sufriendo vértigos y no es seguro que pueda competir este domingo. De momento, las sirenas españolas lograron un quinto puesto en la rutina técnica de equipo, insuficiente para volver a Río en agosto (sólo hay tres plazas olímpicas en juego).