No es un Madrid-Barça ni un Sevilla-Betis, pero Toronto (Canadá) y Arlington (Texas) están bastante más cerca de lo parece, al menos en lo que a rivalidad en el beisbol se refiere, porque los Blue Jays y los Rangers se tienen ganan. Demasiadas quizás.
La prueba evidente fue durante el encuentro que disputaron este domingo en Texas. No sólo por lo apretado del marcador (7-6 para los texanos) sino porque nadie, quizás ni él mismo, esperaba la reacción de Rougned Odor. El segunda base venzolano de los Rangers reaccionó a una acción cuestionable del dominicano José Bautista. Un derechazo directo al mentón que lo dejó grogui durante un segundo. Justo el tiempo que tardó en armarse la mundial.
Los árbitros tardaron más de 10 minutos en deshacer la bronca en el diamante, con los dos banquillos intentando separar o echando más leña al fuego intermitentemente. Y eso que la MLB actuó de inmediato expulsando hasta cinco jugadores: Rougned Odor, Steve Buechele, Jose Bautista, Josh Donaldson y DeMarlo Hale.
La cosa no pasó a mayores a pesar de que en la novena entrada el lanzador de los Blue Jays Jesse Chávez fue expulsado después de golpear intencionadamente a Prince Fielder. La última expulsión de un encuentro que había empezado a calentarse cuando el pitcher de los Rangers también golpeó a Bautista de forma intencionada en la anterior entrada, poco antes de la tángana.
En cualquier caso, la rivalidad entre texanos y canadienses viene de largo. Y con Bautista de nuevo como protagonista, pues en las Series de la American League División de 2015, el dominicano, con el partido empatado a tres carreras, conectó un batazo que le dio un cuadrangular de tres carreras para los de Toronto y en su celebración lanzó el bate de una forma que tanto aficionados como expertos consideraron una falta de respeto grave.