Un aficionado del equipo de béisbol del Boston Red Socks no pudo entrar al estadio con la entrada que había comprado debido a que publicó una fotografía de ella en su cuenta de Instagram donde aparecía el código de barras. Esto fue aprovechado por el ladrón para que la robará y lo escaneara en el estadio antes de su llegada.
Según recoge el medio local Boston 25 News, el incidente se produjo al publicar Robbie Johnson una foto de la entrada del partido de la World Series. Johnson fue a las taquillas con su entrada y allí le dijeron que su entrada había sido escaneada un par de horas antes de que él llegará al estadio.
El aficionado del Boston Red Socks pagó 395 euros por una nueva entrada para poder acceder así al estadio y ver el partido. Una vez entró, Johnson acudió al sitio de la entrada robada y no vio a nadie sentado.
En la imagen que subió a Instagram se veía el código de barras de la primera entrada que había comprado con su número identificativo, lo que el ladrón aprovechó para escanearla, realizar un duplicado y entrar con ella en el estadio.
Desde la compañía Ace Tickets ya advirtieron a sus compradores sobre este tipo de robos. Según April Marin, la gerente de relaciones para la comunidad regional de la compañía, para publicar una fotografía de alguna entrada hay que "asegurarse de que lo cubres, especialmente el código de barras e incluso la localización del asiento".
Hay que tener cuidado que se comparte en las redes sociales ya que cualquier persona puede "robar" algo, en este caso una entrada a un partido de béisbol, aunque lo mismo puede pasar con billetes de avión o premios.