La defensa de los Hispanos da la victoria ante Polonia

La selección española tuvo que echar mano de su férrea defensa para evitar una sorpresa desagradable ante Polonia, en la segunda jornada del Memorial Domingo Bárcenas, en el partido en el que Dani Sarmiento cumplió cien encuentros como internacional.



El combinado de Jordi Ribera empezó con mucho ritmo, dispuesto a dar velocidad al partido, conscientes de la solidez y la corpulenta defensa polaca, y logró una buena renta de goles en los primeros minutos (9-5 en el minuto 12).



Pero a medida que pasaban los minutos, Polonia se asentó en la pista, frenó los contraataques rivales y dificultó mucho el ataque estático español, que probó durante varios minutos acciones ofensivas de siete jugadores.



El equipo polaco, además, encontraba con relativa comodidad buenas opciones de lanzamiento, lo que hizo que el marcador poco a poco se ajustara hasta el 17-16 del descanso.

El descanso decisivo

En el descanso, España se mentalizó de la necesidad de incrementar su eficacia defensiva y así lo puso en práctica. Tras el 17-17 inicial, único momento en el que Polonia no estuvo por debajo, los hispanos solo encajaron un gol más en los primeros diez minutos.



Así, conscientes de las dificultes en el ataque estático y la falta de ritmo competitivo de algunos jugadores, la selección española cocinó a fuego lento su victoria, sin las prisas de la primera mitad y con un buen control del partido gracias a su defensa.



Con diferencias entre uno y tres goles, España llegó a los últimos minutos del partido en los que hizo valer su veteranía y su 'saber hacer' para poder sentenciar la victoria y no tener que pasar apuros.



El 34-28 final permite a los Hispanos llegar invictos a la última jornada y con el bagaje de goles favorable frente a su rival, Bielorrusia, que también cuenta por victorias sus dos partidos.

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