El burgalés Jesús Gómez consiguió la medalla de bronce en la final de 1.500 metros de los Europeos en pista cubierta, que registró la derrota del noruego Jakob Ingebrigtsen a manos del defensor del título, el polaco Marcin Lewandowski. Un cambio brusco al penetrar en el último giro puso en cabeza al polaco, que no consintió que el joven noruego le adelantara. Venció con 3:42.85, seguido de Jakob (3:43.23) y de Gómez (3:44.39).

España, primera potencia histórica del 1.500 europeo en pista cubierta -había ganado 19 medallas, incluidas siete de oro-, no conseguía una presea desde que el sevillano Manuel Olmedo obtuvo la de oro en París 2011. Jesús Gómez, el nuevo talento del mediofondo español, había refrendado su condición de campeón de España al clasificarse para la final, en tanto que el leonés Saúl Ordóñez abandonó lesionado y el gallego Adrián Ben quedó a las puertas de la repesca en semifinales.

El menor de los Ingebrigtsen, Jakob, no pudo completar en pista cubierta el doblete europeo que obtuvo el año pasado al aire libre en Berlín (1.500 y 5.000). El noruego disputaba su cuarta carrera en tres días (segunda de 1.500 y otras dos de 3.000), todas las anteriores resueltas con victoria, y terminó acusando el gasto. Esta vez no le acompañaba su hermano mediano, Filip, que había sido eliminado después de ganar su serie por salirse de pista.

El alemán Marius Probst marcó el ritmo el primer 500, hasta que Jesús Gómez tomó la punta. Jakov y Lewandowski se colocaron a su estela. El noruego atacó a dos vueltas del final y puso en fila al grupo, llevándose consigo al polaco y al español. Lewandowski, una gran rematador, dominó por completo el último giro y se alzó con la victoria pese a los esfuerzos de Jakob por alcanzarlo, mientras Jesús Gómez mantenía su tercera posición hasta el final. 

[Más información: España, plata en el 4x400 masculino en los Europeos en pista cubierta]

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