Tania y Lorena, historia de ASOBAL: "Un día no será noticia que una mujer arbitre un partido"
No son hermanas, pero siguen los pasos de las Bonaventure. El balonmano masculino español y la Liga ASOBAL hicieron historia con su arbitraje.
17 diciembre, 2020 00:40El Barça - Bada Huesca de este pasado martes no fue un partido cualquiera de Liga ASOBAL. El conjunto azulgrana sigue siendo intratable en esta competición aplastó a los oscenses y da cuerda a esa racha que le ha llevado a ganar los 16 partidos que ha jugado este año. Pero los focos fueron para la pareja arbitral de ese encuentro. Lorena García y Tania Rodríguez son dos colegiadas de categoría División de Honor Plata, pero, por un día, dirigieron un choque de la máxima división nacional.
Son víctimas del gran problema de este deporte en España, la falta de profesionalización tanto de los jugadores como de los árbitros. Tania es administrativa en una empresa en Valencia, mientras que Lorena es entrenadora personal en Zaragoza, aunque también trabaja como profesora particular y ayuda en el negocio de sus padres. "Siempre tienes que hacer números para poder llegar a todos lados. Con tiempo y esfuerzo lo vamos sacando", explica la primera en conversación con EL ESPAÑOL.
Pero todo este esfuerzo tuvo su premio este martes. La Real Federación Española de Balonmano seleccionó esta fecha como un choque especial subiendo de categoría a las dos árbitras para que hicieran historia. Nunca antes una pareja de mujeres había dirigido un partido de ASOBAL. Sí que lo habían hecho antes de forma individual Cristina Fernández, Nandi Espino y Agatha García, pero siempre acompañadas por un hombre.
Ambas se han hecho su sitio en una profesión con un porcentaje casi del cien por cien de varones. "Es un cambio. Esto es abrir una nueva puerta para el arbitraje femenino. Poco a poco veremos a más chicas arbitrando en ASOBAL", explica Tania. Lorena también piensa en el futuro, pero de la pareja: "Es el primero y esperemos que no sea el último. Tenemos los pies en la tierra. Cada fin de semana es un nuevo reto y esperemos que las recompensas lleguen cuando tengan que llegar".
Una ilusión
Parece una auténtica nimiedad, pero la importancia de este hito no es solo para la galería. Se trata de una historia de satisfacción personal, de ver cómo el trabajo que hacen a diario tiene una gran recompensa. Su nombre quedará para la posteridad, pero, por encima de todo, ellas guardarán esta fecha en su memoria como el día en el que su sueño se hizo realidad. "Yo la resumiría en inolvidable, fue una gran victoria para todas las mujeres", explica Tania.
Las sensaciones que tuvieron ambas en el partido quedan resumidas con esta anécdota que explica Lorena: "Faltando 30 segundos del partido le dije por el pinganillo: Tania, nos quedan 30 segundos, disfrútalos. Y la miré y la vi emocionada. Y me emocioné yo. Dije: Bueno, venga, al partido. Obviamente sentimos mucha felicidad, había mucha tensión acumulada y estábamos muy felices por lo que habíamos hecho".
Por ahora, seguirán dirigiendo encuentros en División de Plata, pero saben que es un paso importante para alcanzar su objetivo. "Siempre decimos que nuestra meta es cada fin de semana, luego llegará todo. Pero es cierto que nuestra intención es asentarnos en Liga ASOBAL y que detrás de nosotros vinieran muchas más mujeres", desvela la colegiada maña. Aún no quieren escuchar hablar sobre Europa y las competiciones de selecciones, pero desean que este medio de la noticia algún día.
El ejemplo
No son hermanas como las Bonaventure, aunque algunos lo piensen. "Ayer nos preguntaban si éramos mellizas. Cuando analizamos los vídeos, hasta a nosotras nos cuesta reconocernos. Es algo muy anecdótico", explica Lorena a EL ESPAÑOL. Es evidente que su referente es esta pareja de gemelas francesas que han arbitrado a hombres en partidos internacionales en varias ocasiones. "Las Bonaventure son las mejores árbitras del mundo y queda muchísimo para llegar a su nivel. Ojalá un día sigamos sus pasos", argumenta la misma protagonista.
El hecho de que cada una sea de una parte de la península diferente hizo que empezaran sus carreras de manera individual. "Cuando nos designaron el primer partido, estábamos arbitrando con otros chicos. No nos conocíamos prácticamente", cuenta Tania sobre esos inicios. "Cada una arbitraba con un compañero: Tania en Valencia y yo en Zaragoza. Hace cinco temporadas la Federación nos puso juntas y así hemos formado una pareja muy consolidada", completa esa historia Lorena.
El hecho de que sigan separadas no implica que no trabajen juntas el resto de la semana. La valenciana desvela cómo es esa preparación de los partidos: "Además del trabajo físico, también el de vídeos con las decisiones que hemos tomado en los partidos. Trabajamos sobre ellos para que esos errores no se vuelvan a producir".
¿Por qué ellas?
A pesar de que ha habido otros ejemplos de mujeres en la historia de ASOBAL, nunca lo hicieron como pareja arbitral. Han tenido que llegar Tania y Lorena para que esto se produjera. La primera no sabe por qué explicarlo y cree que se debe a que estaban "en el sitio adecuado en el momento adecuado", mientras que la segunda estima que ha sido su trabajo el que les ha llevado a ser las elegidas: "Nosotras hemos priorizado mucho el arbitraje y eso ha hecho que hayamos llegado hasta aquí".
Tania comenzó todo gracias a su hermano, que un día le puso en la mano un silbato y nunca más se volvió a separar de él: "En ese momento, algo se despertó en mí. Creció la incertidumbre, hice el curso, fui arbitrando más partidos y el gusanillo salió a relucir". Todo eso ha llevado a que ambas sean la primera pareja de mujeres en dirigir un partido de ASOBAL, aunque Lorena explica que lo importante es que "los imputs de la Federación han sido muy positivos".
Son conscientes de que están cambiando la historia, que han dejado un precedente para muchas mujeres y ese es el fin de todo el gran trabajo que han hecho hasta este martes. "Desde hace tiempo se escucha más al deporte femenino. Lo que importa es que se está escuchando y que se escuche más; que deje de ser noticia que una mujer tiene una oportunidad en un deporte y que sea una normalidad más", apunta Tania mirando al futuro.
Lorena también coincide que han tenido ese empujón del cambio en la sociedad que está dando más visibilidad al deporte femenino. "Desde la Federación se está haciendo un gran esfuerzo para instruir a árbitras para que poco a poco igualemos el número con los hombres. Se está dando más visibilidad y somos unas cuantas más en las categorías nacionales", sentencia la aragonesa.
Episodios desagradables
Pero, hasta llegar a este día, han tenido que luchar no solo contra las dificultades que trae consigo este deporte, también contra algunos micromachismos. Recalcan que "tan pocos que es mejor obviarlos", prefieren no dar bola a que, dentro de una modalidad en la que el respeto al colegiado es tan valorado, haya alguna mancha en el historial. Aún así, Tania reconoce que "escuchar, escuchas de todo en una grada".
"Siempre digo que estoy muy orgullosa de mi deporte. Pocas veces hemos vivido situaciones machistas. Sí que hemos tenido algunas anécdotas; por ejemplo: no se creían que éramos las árbitras del partido o no tenían vestuarios diferenciados y nos teníamos que cambiar con otros hombres. Los comentarios machistas han sido", explica Lorena sobre esos momentos en algunos pabellones en los que no se creían que dos mujeres iban a dirigir el partido.
Este martes, ambas señalan que los dos equipos les trataron con mucho respeto. De hecho, en toda su trayectoria los clubes, en líneas generales, se han portado bien con ellas. "Los equipos siempre nos han mostrado un gran respeto. Llevamos mucho tiempo arbitrando y nos hemos ganado el respeto en la pista. Nos lo devuelven con cariño y respeto", explica la zaragozana.
Los únicos episodios "de tensión" que señala la valenciana se deben a momentos en los que "estás a 200 pulsaciones". "Hay momentos en los que puedes tener algún contratiempo, pero siempre se quedan en el 40x20. Un equipo trabaja durante toda la semana como nosotras, y no le salen las cosas. En cualquier caso, siempre intentamos tener un trato cordial", argumenta Tania.
La misma colegiada explica todos esos momentos así: "Intentamos no hacer caso. No hemos tenido nunca ningún problema. Comentarios desafortunados todo el mundo ha escuchado. Siempre se ha quedado ahí, no le hemos dado más importancia. La afición siempre forma parte del juego y entendemos que haya nervios entre ellos. Siempre que no salga del partido, hacemos oídos sordos y disfrutamos del deporte".
Lo más importante es que todo el mundo las respeta, más después del hito de este martes. Sus nombres ya no serán desconocidos a nivel nacional. Lo único que esperan tanto Tania como Lorena es que esto no sea una excepción. "Al resto de las mujeres les diría que es un trabajo muy complicado, pero que se puede llegar, como hemos conseguido nosotras, y hay que sacrificar muchas cosas y trabajar muy duro cada semana", es el mensaje final que dejan las protagonistas de este hito en el balonmano masculino nacional.