"Oh, say can you see

By the dawn's early light

What so proudly we hailed

At dhe twilight's last gleaming?

...
"

¿Quién no ha escuchado alguna vez el himno de Estados Unidos y ha visto tanto el respeto como la emoción entre la gente? Una especie de 'sana envidia' recorre el cuerpo en la mayoría del resto del mundo cuando llegan las imágenes en las que con la bandera de fondo, se comienza a entonar el himno, 'The Star-Spangled Banner', y los ciudadanos se llevan la mano al corazón. Ya sea en el colegio, en un podio o antes de un evento tan multitudinario como la Super Bowl.

En los últimos años se han producido varios capítulos polémicos en torno a los eventos deportivos y esa veneración al himno y a la bandera. Momentos que algunos los han utilizado para reivindicar, entre otros, la lucha contra el racismo. Aunque pocas veces una imagen da la vuelta al mundo de esta manera, tal y como le ha pasado a Gwen Berry.

Gwen Berry es una atleta estadounidense de 32 años que acaba de conseguir su billete para los Juegos Olímpicos de Tokio. Pues bien, la lanzadora de martillo acabó tercera en las pruebas que tuvieron lugar en Eugene (Oregon), los conocidos como trials que sirven para ganar un billete para la cita olímpica.

Ese puesto como tercera le hizo valedora del billete para Tokio. Por delante de ella quedaron DeAnna Price, quien ganó la prueba con un lanzamiento de 80,31 metros -alrededor de 2,2 metros más que el de Gwen Berry, y Brooke Andersen, que acabó en segunda posición.

Al finalizar la prueba, llegó el momento de la entrega de medallas en el podio y ahí fue cuando Gwen Berry acaparó todas las miradas. La atleta se giró desde el tercer cajón y dio la espalda a la bandera mientras sonaba el himno de EEUU. Y no solo eso, sino que también se tapó con una camiseta con el lema 'atleta activista'.

El hecho de que no suene el himno en cada entrega de medallas y sí a la misma hora cada día molestó a la deportista. Creyó que todo estaba "preparado" y así lo confirmó cuando se le preguntó por su gesto de mirar a las gradas en lugar de a la bandera: "Siento que estaba preparado, que fue una trampa. Siento que lo hicieron a propósito, y yo estaba enojada, para ser honesta".

"Estaba pensando en lo que debería hacer. Al final, me quedé allí y me balanceé. Me puse la camisa por la cabeza. Fue una verdadera falta de respeto. Sé que lo hicieron a propósito, pero todo estará bien. Ya veo qué pasa", continuó explicando Gwen Berry tras lo sucedido.

Versiones cruzadas

La USATF (USA Track and Field), según ha informado Reuters, confirma que el himno de Estados Unidos se toca cada día de acuerdo a un horario previamente establecido. Esta hora son las 17:20, pero en la jornada del sábado sonó a las 17:25, cinco minutos más tarde.

Susan Hazzard, portavoz de USATF, así lo reiteró: "El himno nacional estaba programado para sonar este sábado a las 5:20 pm. No esperamos hasta que los atletas estuvieran en el podio para los premios de lanzamiento de martillo. El himno nacional se toca todos los días según un horario previamente publicado".

Ante todo esto, Gwen Berry reveló que les dijeron que "lo iban a tocar antes" de que se marcharan y que luego lo tocaron cuando ellas estaban "ahí fuera". "Realmente no quiero hablar sobre el himno porque eso no es importante. El himno no habla por mí. Nunca lo ha hecho", agregó la atleta en declaraciones para ESPN.

Activista comprometida

No es la primera vez que la deportista se coloca en el foco de atención por un acto reivindicativo. En el año 2019, durante los Juegos Panamericanos celebrados en Perú, perdió a varios de sus patrocinadores por levantar el puño en señal de protesta contra el racismo cuando estaba en el podio.

Entonces, Gwen Berry también recibió una suspensión condicional de doce meses sobre un castigo del Comité Olímpico y Paralímpico de Estados Unidos. Ante esta situación, ella dijo, en la CNN, que "fue extremadamente devastador" puesto que se cortaron parte de sus ingresos.

Aunque entonces el Comité perdonó a la atleta, el COI ha puesto de relieve que prohíbe este tipo de manifestaciones protesta. Antes de la cita de Tokio, se ha hecho saber que se hará cumplir la regla 50 de su código, la cual establece que "no se permite ningún tipo de manifestación o propaganda política, religiosa o racial en ningún sitio, lugares u otras áreas".

Estos avisos no comprometen a la atleta. Su rival, DeAnna Price, ya ha afirmado que se siente "muy orgullosa" de Gwen Berry puesto que "la gente debería decir lo que quiera decir". "Mi propósito y mi misión son más grandes que los deportes. Estoy aquí para representar a aquellos que murieron debido al racismo sistémico. Esa es la parte importante. Por eso voy. Por eso estoy aquí hoy", ha sentenciado Berry.

[Más información: Muere Abdalelah Haroun, atleta catarí, a los 24 años en un accidente de tráfico]

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