La selección española de balonmano viene de ganar las dos últimas ediciones del Europeo y como decía Adrià Figueras en EL ESPAÑOL: "La Selección sigue siendo igual de ambiciosa". Ahora toca poner su título en juego y este camino ha comenzado con victoria para los 'Hispanos'. No fue un triunfo fácil para el combinado nacional, pero acabaron imponiéndose a la República Checa en Bratislava por 28-26.
El combinado nacional sabía que tenía que empezar el Campeonato de Europa de Hungría y Eslovaquia con buen pie y para ello tiraron de intensidad defensiva, su mejor arma y pilar de los últimos éxitos de esta selección. Y, precisamente, fue la defensa la que tiró del carro en los instantes iniciales del encuentro.
Los de Jordi Ribera demostraron que el relevo generacional no sufrirá importantes movimientos en defensa, aunque parece que costará algo más apuntalar este en ataque. El portero checo Tomas Mrkva se convirtió así en un muro en el que se fueron estrellando una y otra vez los 'Hispanos'.
Los intentos de la Selección quedaron reducidos a lanzamientos lejanos de Antonio García y Jorge Maqueda. Pero Tomas Mrkva mantuvo a la República Checa, firmando cinco paradas en ocho minutos. Así, pasados los diez primeros minutos de partido, el combinado checo tomó ventaja de dos goles.
Con estos registros, la defensa española aumentó la intensidad y así tardaron los checos más de seis minutos en volver a marcar un gol. Esta solidez atrás hizo que España firmase un parcial de 4-0 para dar la vuelta al luminoso. La mejora en defensa inspiró al ataque y destacó un Eduardo Gurbindo que anotó tres tantos en el primer parcial.
Gurbindo y Tarrafeta fueron poniendo dinámica al juego ofensivo y aprovechando las exclusiones de Kasparek y Franc se llegó al 12-8 en el marcador, que acabó en una ventaja de tres goles (14-11) al llegar el descanso.
España pudo con el muro
Tras el paso por vestuarios, la figura de Mrkva todavía se hizo más gigante. Hasta seis intervenciones en los diez primeros minutos del segundo tiempo en disparos de seis metros. Esto provocó que la distancia en el marcador se fuese reduciendo hasta los dos goles, pero Gurbindo mostró el camino a seguir a sus compañeros.
Otros tres goles marcó tras el descanso y eso que la defensa de la República Checa aumentó su agresividad con el paso de los minutos. Todos los ingredientes juntos acabaron con la ventaja reducida a un solo gol. 21-20 a falta de menos diez minutos para el final del choque.
Ahí apareció entonces Agustín Casado, uno de los debutantes en el torneo, que con dos goles prácticamente consecutivos dio aire a a los 'Hispanos'. Pero el gran protagonista en la recta final fue un veterano. Antonio García, con sus goles en el tramo decisivo, acabó dando la victoria a la Selección. Primer test superado.
España 28-26 República Checa
España: Pérez de Vargas (1); Aleix Gómez (4, 3p), Maqueda (2), Gedeón Guardiola (-), Peciña (-), Antonio García (3) y Ángel Fernández (3) -equipo inicial- Corrales (ps), Gurbindo (6), Solé (2), Figueras (3), Cañellas (1), Casado (2), Ariño (), Tarrafeta (1) y Sánchez-Migallón ().
República Checa: Mrkva; Jurka (1), Kasparek (3), Babak (5), Becvar (1), Hrstka (6, 3p) y Reichl (3) -equipo inicial- Mizera (ps), Piroch (2), Cip (1), Petrovsky (2), Vanco (-), Klima (-), Patzel (1), Solak (1) y Franc (-).
Marcador cada cinco minutos: 1-1, 2-4, 5-4, 9-7, 12-9 y 14-11 (Descanso) 15-13, 17-15, 20-16, 21-19, 25-22 y 28-26 (Final).
Árbitros: Pavicevic y Raznatovic (MNE). Excluyeron por dos minutos a Cañellas y Peciña por España; y a Kasparek (2), Franc, Petrovsky, Becvar, Patzel y Solak por la República Checa.
Incidencias: Encuentro correspondiente a la primera jornada del grupo E de la primera fase del Europeo de Hungría y Eslovaquia disputado en el Ondrej Nepela Arena (Bratislava, Eslovaquia).