El Comité Olímpico Español ha anunciado de manera oficial el fin de la candidatura nacional a los Juegos Olímpicos de Invierno del año 2030. Alejandro Blanco, como presidente de la institución, ha comparecido en un acto donde ha explicado cómo se ha producido todo el proceso de negociación con el Gobierno y con las comunidades de Aragón y de Cataluña.
El máximo dirigente del COE ha mostrado su pesar por tener que dar una noticia que tanto ha peleado por evitar. Sin embargo, el desacuerdo político promovido por Aragón y por su presidente, Javier Lambán, ha terminado dando sus frutos una vez la Comisión Técnica creada para impulsar el proyecto ya había dado luz verde al proyecto.
Blanco ha explicado que, una vez el proyecto deportivo estaba cerrado, han sido las reuniones de carácter político posteriores las que han derribado el futuro de la candidatura, la cual tenía sus puntos fuertes por encima del resto de rivales.
"Nosotros no teníamos el mejor proyecto desde el punto de vista técnico porque no podemos hacer grandes inversiones. Las pruebas que requieren un importante costo tenían que hacerse fuera aunque no había ningún acuerdo con otros países. Pero teníamos dos pilares como la regeneración de un territorio y un proyecto deportivo basado en el dialógo histórico entre el Gobierno de España, el gobierno de Aragón, el gobierno de Cataluña y COE. Y eso le daba una fuerza que ninguna otra candidatura tenía. Este proyecto tenía el fin de integrar y servir para escuchar a la gente".
El presidente del COE ha explicado con todo tipo de detalles dónde ha esto el principal foco de conflicto, apuntando a esa fase de debate político en el que todo se ha terminado estancando: "El debate de la parte de técnica estaba resuelto, pero cuando entran los representantes políticos ya no hay acuerdo y no se consigue en las reuniones posteriores. La falta de acuerdo fue política ante la negativa de Aragón de respetar el pacto técnico que se había alcanzado anteriormente. El fin seguía siendo presentar una candidatura conjunta o sino no habría candidatura".
Y como ese objetivo no se ha podido llevar hacia delante, el proyecto de estado que el COE pretendía convertir en éxito ha terminado fracasando. Lo único positivo de todo es que, además del grado de cooperación que había conseguido el Comité Olímpico entre dos regiones como Cataluña y Aragón, las buenas relaciones comunicativas con el COI siguen estando vigente de cara a nuevos proyectos. No obstante, esto tendrán que esperar ya hasta el plazo de 2034.
El inicio del proyecto
Alejandro Blanco ha comenzado su comparecencia explicando desde el principio cómo se ha ido gestando la derrota de este gran proyecto: "El 15 de julio del 2021 envíamos una carta anunciando una eventual candidatura de Cataluña y España para para los Juegos Olímpicos de Invierno de 2030. Esa carta iba acompañada de otras tres cartas firmadas por el Presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, el presidente de Cataluña, Pere Aragonés, y el presidente de Aragón, Javier Lambán".
"Desde ese momento el COE ha procedido a comunicar en los respectivos territorios la presentación de la propuesta de la candidatura y las ventajas de celebrar los Juegos en los territorios del Pirineo de Aragón y Cataluña así como el funcionamiento del proyecto".
Blanco ha confirmado que, una planteada la idea, había dos manera de arrancar la candidatura: "Una era crear una Comisión Técnica, hacer un proyecto y presentarlo. Pero nosotros pensamos en una mucho más participativa y democrática. Se propuso una comisión formada por tres personas del Gobierno de España, tres del gobierno de Aragón, tres del gobierno de Cataluña y tres del COE. Todo ello estaba coordinado por Víctor Sánchez".
"Los representantes que tenía el COE eran el presidente de la Federación Española de Deportes de Invierno, May Peus, el presidente de la Federación Española de Deportes de Hielo, Fran González y el representante de la Federación de Montaña, Alberto Ayora. Esta comisión se reunió en siete ocasiones desde el 21 diciembre del 2021".
El COE celebró que en aquel momento hubiera luz verde para el pacto deportivo: "Al finalizar estas reuniones se llegó a un acuerdo de distribución de las sedes y de las pruebas que fue comunicado a los diferentes gobiernos, convocándoles a una reunión institucional para el día 1 de abril del 2022. Se convoca esa reunión y tres días más tarde, el presidente de Aragón, Javier Lambán, me envía un escrito diciendo que no estaba de acuerdo con la distribución acordada por la Comisión Técnica".
"La propuesta de la nieve la hicieron los técnicos de Aragón y ese fue el punto principal del debate. Se celebró aquella reunión a lo que no acudieron los miembros de Aragón y varias reuniones posteriores. Dado que el proyecto se iba a hacer en los dos territorios, lo lógico es que ambos se pongan de acuerdo, pero no que sea el COE quien tenga que hacerlo". Aún así, el Comité Olímpico Español mostró su determinación y tomó esa figura para intentar seguir vetebrando el proyecto.
Llegan las confrontaciones
Alejandro Blanco continuó explicando algunas de las disquisiciones que se fueron encontrando entre las dos rivalidades encontradas dentro de la candidatura: "En una de estas reuniones, Cataluña propone pasar algunas pruebas del valle de Arán a Cerler. Había mucho interés en que todos los valles tuvieran sus pruebas. A cambio, las cinco pruebas de patinaje pasaban a Cataluña y de esa manera se seguía manteniendo la distribución de 54 pruebas en Aragón y 42 en Cataluña. Pero esta propuesta no fue aceptada y se celebró otra reunión. En la última reunión, Aragón, a través de Felipe Faci, propone una nueva distribución por lotes. Pero Cataluña indicó que no estaba de acuerdo".
El presidente del COE resume así la caída de su iniciativa una vez tuvo que rendir cuentas al Comité Internacional del desastre: "Ante el desacuerdo tuvimos que anular dos visitas de los expertos del COI y dos videoconferencias con la comisión del COI porque no teníamos proyecto. El Comité Olímpico Español ha informado al COI de que sigue teniendo la intención de presentar un proyecto para una candidatura a los Juegos Olímpicos de Invierno en el futuro aunque en la actualidad no estemos en condiciones de hacerlo. Se espera continuar con la buena relación y comunicación entre ambas instituciones".
Por último, Alejandro Blanco ha querido agradecer el apoyo de todos aquellos que han sumado para intentar sacar adelante un cuestión que ha terminado dándose por imposible tras meses pelea: "He sentido el apoyo de las bases para que la candidatura siguiera adelante. Pero por circunstancias que todos conocen, este proyecto ha derivado en enfrentamientos políticos importantes basados algunas veces en mentiras".
"Nuestros rivales deberían ser candidaturas de otros países y no nuestras propias instituciones. No podemos luchar nosotros y mostrar esa confrontación ante el movimiento olímpico. Todo eso ha lastrado y agotado nuestro proyecto. Esperamos que en el futuro podamos mostrar una nueva candidatura".
"El resumen es que aquello por lo que se ha luchado no podemos mantenerlo. No existe una candidatura conjunta y abrimos la posibilidad de si algún territorio quiere presentar un proyecto para el futuro, lo haga ante el Comité Olímpico Español para después ser presentado al COI porque la línea de diálogo no se ha roto como hemos demostrado. No podíamos presentar ante el mundo diferencias políticas e ideológicas".