Susto tremendo el vivido por Conor McGregor. El luchador de la UFC ha vivido unas últimas horas llenas de tensión tras sufrir un atropello mientras andaba en bicicleta el pasado viernes. El irlandés, por suerte, ha conseguido salir ileso del accidente y ha explicado lo sucedido a través de sus redes sociales.
Una situación que podría haberse vuelto trágica debido a la magnitud de lo ocurrido. Sin embargo, McGregor únicamente sufrió un rasponazo tal y como compartió en los vídeos publicados. Además, el causante del golpe se paró a atenderle nada más impactar con él y le llevó a su casa tras el atropello.
"Recibí un golpe de un auto justo ahora desde atrás. Una trampa del sol, el conductor no podía verme. A toda velocidad me llevó. Gracias Dios, no era mi momento. Gracias a la lucha libre y al judo también. Tener conciencia a la hora de caer me salvó la vida", recalcaba el luchador irlandés tras compartir las imágenes.
"Nick acaba de golpearme con su auto allí está mi bicicleta en la cajuela. No era mi día, Nick. Dios te bendiga. Soy un jodido bastardo y sigo aquí, gracias a dios, es todo lo que importa", agregaba. Un enorme susto para McGregor, que se encuentra sumergido en un caso de acoso sexual en estos momentos.
La polémica estrella mostró las consecuencias del accidente y enseñó los pantalones rotos por la parte trasera como la principal secuela. Aún así pudo volver sano y salvo a casa tras ser llevado a su domicilio por el conductor, al que McGregor se dirige como "Nick".
[McGregor, el ‘rey’ del deporte: supera a estrellas como Messi o Tom Brady en ganancias por minuto]
En el vídeo, también se muestran las disculpas del mencionado Nick. "Lo siento mucho". "Todo bien, todo bien", dice 'The Notorious'. "No te preocupes", recalca McGregor ante las insistentes para la de la persona que le había atropellado.
Acusado de agresión sexual
En los últimos días, 'The Notorius' ha visto cómo se reabría el caso de agresión sexual del que está acusado. Todo sucedía el pasado 17 de julio, día de su cumpleaños, en la isla de Formentera. Allí realizó una fiesta privada en un yate y donde era señalado por una mujer como agresor.
La mujer, tras ser atendida por servicios médicos de la Cruz Roja, se observó que sufría magulladuras y una fractura en su mano tras las pertinentes pruebas. Una vez ya en Irlanda, interpuso una denuncia a Conor McGregor. Y todo parece que se debió a una acalorada discusión que acabó en una pequeña trifulca entre la señora de 40 años y uno de los luchadores más famosos del hexágono.
Tras colaborar tanto España como Irlanda, el caso se ha reabierto gracias al recurso de reforma presentado por sus abogados. La supuesta víctima ha sido citada en cuestión de días para que ratifique la declaración que ofreció en su momento contra el luchador y parece que el proceso judicial seguirá el transcurso fuera de las fronteras de nuestro país.