El pasado fin de semana, el Mundial de cross dejó una de las imágenes más llamativas de los últimos tiempos en el deporte. La atleta etíope Letesenbet Gidey se desvaneció cuando estaba a punto de cruzar la línea de meta de manera incomprensible y disparó todas las alarmas. Por suerte, fue ayudada por unos integrantes de su cuerpo técnico, se levantó y sus problemas parece que no pasaron a mayores.
Este episodio se produjo en el Campeonato del mundo de cross que se disputó en la localidad de Bathurst, en Australia, y volvió a poner de relieve el debate sobre la excesiva exigencia a la que están expuestos deportistas de este nivel. La corredora dio un gran susto a todos los asistentes a la prueba, pensando en que su desvanecimiento podría tratarse de algo más grave, aunque pudo levantarse segundos después e incluso llegó a terminar la prueba.
Letesenbet Gidey llegó a los metros finales de la prueba en cabeza y con unos metros de ventaja más que suficientes sobre su más inmediata perseguidora, Beatrice Chebet. Sin embargo, aproximadamente a unos 30 metros de la línea de meta, y cuando ya tenía el título mundial en sus manos, la etíope se desvaneció y cayó al suelo sin poder dar ni un solo paso más. Durante unos cuantos segundos, permaneció en el suelo aturdida mientras veía como el resto de sus rivales iban superándola para terminar la prueba, hasta que unos miembros del cuerpo técnico llegaron en su auxilio.
Unos componentes de la expedición etíope saltaron al circuito, ayudaron a Gidey a levantarse, y la acompañaron hasta la línea de meta para que pudiera terminar la prueba aunque se quedara sin el oro. Beatrice Chebet fue quien finalizó en primer lugar y terminó proclamándose campeona del mundo.
Fue descalificada
El drama de Letesenbet Gidey no fue solo el de desvanecerse a escasos metros de la línea de meta y perder la medalla de oro que ya estaba acariciando. Su excesivo esfuerzo le hizo caer al suelo antes de tiempo, pero aunque llegó finalizar la competición, el hecho de que fuera ayudada por unos miembros de cuerpo técnico hizo que además fuera descalificada de la prueba.
Por si fuera poco, si Letesenbet Gidey hubiera podido finalizar la prueba de manera correcta también habría contribuido a que Etiopía se llevara la medalla de oro en la clasificación por equipos. Sin embargo, su descalificación terminó por cambiar el orden de los factores y su país se quedó de igual manera sin la primera plaza.
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Gidey es plusmarquista en las modalidades de 5.000 y 10.000 metros, por lo que no es en absoluto una atleta inexperta. Sin embargo, en esta ocasión no supo gestionar bien sus esfuerzos y su cuerpo fue tan al límite que le jugó una mala pasada.