El atletismo italiano está inmerso en una gran discusión. En el campeonato máster del país transalpino disputado recientemente se batió un nuevo récord en la prueba femenina de los 200 metros en pista cubierta. Hasta ahí todo normal, incluso una gran noticia para el deporte, pero la polémica salta cuando se descubre que quien superó esta marca fue Valentina Petrillo, una atleta transexual.
Petrillo inició hace unos años su cambio de sexo. Confesó a su esposa y su hijo que se sentía mujer desde hace tiempo, así que comenzó un tratamiento hormonal para convertir su género al femenino, algo que también trascendió al deporte. Sin embargo, desde que comenzó a competir en la categoría femenina, sus éxitos con notable autoridad por su superioridad física no han hecho más que levantar ampollas.
Su último logro se ha hecho viral. En la prueba de los 200 metros y corriendo desde la calle 5, logró batir la marca de esta disciplina y sumar una nueva medalla de oro en la categoría F50. Con su registro de 26.27, nunca antes ninguna mujer había corrido tan rápido en esta distancia, y su gran sprint final exhibiendo su poderío físico tuvo mucho que ver en este buen registro.
Después de cruzar la línea de meta en la primera posición, Valentina Petrillo celebró con notable rabia su victoria e incluso después hizo caso omiso a casi todas sus rivales en el tartán. Se fue hacia la grada y comenzó a dar saltos, como queriendo sacar la rabia contenida, pero este logro no ha hecho sino desatar de nuevo el debate en Italia.
Fue denunciada
Fabrizio Petrillo, su nombre como hombre, tuvo una trayectoria exitosa también en su anterior etapa deportiva. Con una enfermedad ocular degenerativa diagnosticada, jugó al fútbol sala y posteriormente se pasó al atletismo, donde corrió como paralímpico por sus problemas de visión. Allí logró buenos resultados en disciplinas como los 100, 200 o 400 metros antes de comenzar su cambio de género.
A punto estuvo de ir a los Juegos Paralímpicos de Tokyo 2020, aunque la federación italiana le cerró el camino. Y es que su figura genera mucha polémica, ya que sus propias rivales formularon una denuncia contra Petrillo por lo que consideraban una injusticia.
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Más de 30 atletas italianas llegaron a firmar una petición en la que planteaban la cuestión de su superioridad física, algo que convertía en "injusta la competición". "Mantiene características masculinas que atentan contra los principios de lealtad y de equidad en la base de toda competición deportiva. Si quiere competir con nosotras no tenemos ningún problema, pero que no sea por títulos", comentaron las denunciantes en su escrito.
Mientras tanto, Valentina Petrillo sigue compitiendo contra mujeres y aumentando sus grandes resultados haciendo gala de su superioridad física. La discusión persiste, y muchas de sus rivales persiguen que se haga lo que ellas consideran que debe ser justicia.