La situación de los deportistas trans es un tema de actualidad en el deporte que no cesa. Especialmente en caso de las atletas trans femeninas, es decir, que nacieron como hombres, superaron así el proceso de la pubertad y después decidieron iniciar su transición hacia el nuevo sexo sentido.
Una situación aceptada en buena parte de la sociedad, pero que genera un importante debate en el universo del deporte. Y más si se produce en una disciplina en la que las cualidades físicas de los participantes juegan un papel fundamental. Los hombres aportan, en la mayoría de casos, unas capacidades superiores en términos de fuerza, rapidez, potencia o altura.
Sin embargo, hay veces que este tipo de casos se resuelven de manera inverosímil después de años de peleas, de denuncias y de presencias incluso en los tribunales. Es el caso de JayCee Cooper, una levantadora de peso estadounidense que recientemente ha ganado una batalla legal sin procedentes que lleva bastante tiempo dando de qué hablar.
Su caso, en plena ola de polémica tras la decisión de World Athletics de no permitir a las corredoras trans participar en competiciones femeninas internacionales, supone un paradigma totalmente opuesto. A ella, USA Powerlifting tampoco le permitía competir contra mujeres. Pero años después ha conseguido una victoria que ha dado la vuelta al mundo tras una sentencia que asegura que las posibles ventajas físicas que pudiera tener gracias a su sexo biológico quedarían anuladas por la dureza del proceso que ha vivido, el cual le convertía en una víctima clara de periodos depresivos que podían conducir al suicidio.
El caso de JayCee Cooper
En Estados Unidos se vive un momento realmente tenso y complicado alrededor de la situación de los atletas trans. El debate se ha vuelto tan agrio que las disputas han pasado de los recintos deportivos hasta los tribunales como ha sucedido en el ejemplo de JayCee Cooper, una conocida levantadora de peso estadounidense.
El caso ha quedado ahora recogido por una sentencial judicial que ha sido favorable a la halterófila americana, aunque tal y como expresó oficialmente USA Powerlifting, no ha terminado aún, ya que intentarán reclamar el veredicto. La federación americana decidió en el año 2019 prohibir a JayCee Cooper participar en competiciones femeninas de levantamiento de peso al considerar que su condición de persona trans le hacía jugar con ventajas físicas respecto a sus rivales por su sexo biológico.
Ante esta situación que consideraba discriminatoria, decidió presentar una queja ante el Departamento de Derechos Humanos de Minnesota. Además, decidió enarbolar la bandera de todos los atletas trans que se habían sentido damnificados por esta y otras normas y argumentó que habían violado la Ley de Derechos Humanos del estado.
Dos años más tarde, en 2021, JayCee se unió a Gender Justice, un grupo de defensa de Minnesota para presentar dicha demanda en un tribunal estatal. Y ahí empezó la batalla legal de verdad. Desde aquel momento, el mensaje de USA Powerlifting siempre fue el mismo: basar su prohibición en la evidente ventaja física que JayCee tenía sobre sus competidoras. Sin embargo, esto fue insuficiente.
El fallo del Tribunal le dio la razón a la deportista y ordenó a USA Powerlifting que "cesara y desistiera de todas las prácticas discriminatorias injustas". La sentencia indica que el organismo no puede prohibir la participación de una atleta por motivos de orientación sexual e identidad de género. Pero lo que más repercusión ha generado del caso, más allá de la resolución final, ha sido como este Tribunal ha elaborado su sentencia.
Reconoce que deportistas como JayCee Cooper tienen una ventaja sobre sus oponentes al haber nacido como hombres y al haber pasado por un momento como la pubertad con esa condición biológica. Sin embargo, argumenta que "cualquier ventaja física que un hombre pueda tener sobre una mujer se anula efectivamente por la desventaja competitiva que un atleta transgénero tiene debido a un mayor riesgo de depresión y suicidio". Asegura que esto último se produce por la presión y la persecución social que sufren estas personas en la mayoría de los casos debido a su particular condición. La sentencia finaliza asegurando que "la depresión y el suicidio constituyen una traba deportiva".
El deporte femenino estalla
Tras esta decisión, la propia JayCee Cooper declaró a la NBC sentirse satisfecha tras lograr un triunfo histórico: "Me siento mayormente aliviada. Creo que necesitábamos una victoria así". Sin embargo, ni USA Powerlifting ni las asociaciones en defensa del deporte femenino dan el caso por cerrado y terminado.
En primer lugar, la Federación Estadounidense de Halterofilia, a través de su presidente Larry Maile, ya dejó claro que intentarán recurrir esta decisión que consideran injusta desde cualquier punto: "Nuestra posición ha tenido como objetivo equilibrar las necesidades de las mujeres cis y transgénero, cuyas capacidades difieren significativamente en un deporte puramente de fuerza". A través de un comunicado ya señalaron que intentarían buscar la forma de realizar la apelación más potente.
Esta decisión, que ha supuesto un antes y un después en Estados Unidos y en el historial de políticas trans en todo el mundo, ha provocado el estallido de multitud de asociaciones y organizaciones en defensa del deporte femenino. Una de las más activas en la lucha fue el conocido movimiento Save Women's Sport.
"Este es un deporte basado puramente en la fuerza estática. Cualquiera que haya pasado por la pubertad masculina tendrá enormes ventajas en términos de altura, masa muscular, tamaño de la mano, capacidad pulmonar, fuerza en la parte superior del cuerpo y densidad ósea".
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En su defensa también apareció James Esses, antiguo abogado y cofundador de Thoughtful Therapists, un conocido grupo de reputados médicos y grandes expertos que estudian en todos los ámbitos el impacto de la ideología de género. James se sumó a la defensa realizada por USA Powerlifting, por Save Women's Sport y por todas las diferentes asociaciones que luchan por la supervivencia del deporte femenino que ahora mismo se siente atacado por este tipo de circunstancias y que ante los avances de las diferentes leyes trans en el deporte está más alerta que nunca.