El MGM Grand Garden Arena de Las Vegas (Estados Unidos) tuvo lugar el nuevo combate del año. En él, Devin Haney consiguió retener sus cinturones de campeón del mundo de boxeo del peso ligero ante Vasiliy Lomachenko. Aunque la pelea no estuvo exenta de polémica por la decisión de los jueces.
El combate fue difícil de puntuar, con Devin Haney dominando en los primeros asaltos y con unos rounds finales que fueron para el ucraniano. Sin embargo, los tres jueces dieron como ganador al que fuera discípulo de Floyd Mayweather con unas tarjetas de 115-113 (Tim Cheatham y David Sutherland) y de 116-112 (Dave Moretti).
Con su victoria, Devin Haney retiene sus cinturones de campeón unificado del peso ligero, aunque por el resultado se espera que haya una temprana revancha entre ambos. Las sensaciones para el estadounidense no dejaron de ser agridulces, ya que al conocerse la decisión de los jueces, hubo abucheos y eso que 'jugaba' en casa.
Devin Haney, celebrando su victoria ante Lomachenko con sus cinturones de campeón del mundo de boxeo
El propio Devin Haney tuvo unas palabras después de la pelea para su rival Vasiliy Lomachenko: "Es un futuro miembro del Salón de la Fama". "Fue una bendición. Era mi oponente más duro. Era muy astuto. Esta pelea me puso en los libros de historia para siempre", agregó 'The Dream'.
Invicto
Comenzó el combate con Lomachenko manejando la pelea en el cuadrilátero. Trabajó con su jab y esquivó los golpes que fue lanzando Haney. En el segundo asalto, 'The Dream' empezó a apretar, conectando buenos golpes, pero el ucraniano no se dejó pisar y respondió con buenas combinaciones que pusieron a su rival contra las cuerdas.
El tercer y el cuarto asalto se tradujeron en grandes intercambios, incluso yéndose los dos al suelo, y ya en el quinto Haney se hizo al fin con el ritmo y la batuta atacando al cuerpo de 'Hi-Tech'. Siguieron sin romper ninguno de los dos con constantes intercambios de golpes en los sucesivos rounds.
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A partir del décimo asalto, cuando las fuerzas comenzaron a flaquear, Lomachenko fue mostrando superioridad en el ring. Mucha igualdad a lo largo de toda la pelea y una decisión muy discutida tanto en el propio escenario del combate como entre los aficionados en las redes sociales.
Con el desenlace y la victoria para Devin Haney, el estadounidense retiene su corona del ligero y eleva su marca en el boxeo profesional a 30-0. En la otra cara de la moneda el veterano Vasiliy Lomachenko. El ucraniano de 35 años deja su récord en 17-3 tras el duelo celebrado en Las Vegas.