La pasada madrugada la NHL se llevó un gran susto. En plena disputa del partido que enfrentaba a los New York Islanders contra los Ottawa Senators, uno de los jugadores recibió un duro impacto por parte de un rival y tuvo que ser evacuado en camilla tras golpear su cabeza en el suelo.
Todo sucedió durante el segundo parcial de este encuentro. Cuando restaban poco más de 11 minutos para su final y con el marcador 1-2 favorable al equipo de Nueva York, Erik Brannstrom, el jugador de los Ottawa Senators, fue objeto de esta dura acción que le llevó al hospital.
El sueco ganaba metros y avanzaba en dirección al campo contrario, pero en su camino se cruzó Cal Clutterbuck, de los New York Islanders, para chocar contra él. En el inicio parecía una acción más, propia de las disputas que tiene este juego y que tanta pasión levantan en los aficionados, pero enseguida se vio que aquello había ido más allá.
El jugador de los Ottawa se estrelló después del empujón de su rival primero contra la pared y salió rebotado. Lo hizo con tan mala suerte que su cabeza golpeó directamente sobre el hielo, algo que le dejó muy desorientado pese a contar con todas las protecciones pertinentes, casco incluido.
Brannstrom quedó tendido sobre el hielo, casi inmóvil, y el árbitro tuvo que detener el encuentro ante esta situación. Rápidamente, varios de sus compañeros de los Ottawa Senators acudieron en su ayuda para ver cómo se encontraba, y varios de ellos no tardaron en solicitar la entrada de las asistencias médicas.
Pese a que detuvo el encuentro por la gravedad de la situación, el colegiado no consideró que hubiera ninguna infracción en aquella acción y Clutterbuck, el hombre de los New York Islanders, quedó sin castigo.
Evacuado en camilla
La preocupación fue creciendo al ver que Brannstrom no se levantaba, así que los sanitarios entraron en el terreno de juego para atenderle. De hecho, se llevaron al jugador de los Ottawa Senators en camilla directamente hacia el hospital para hacerle pruebas.
Más tarde, el propio equipo emitió un parte médico a través de las redes sociales para tranquilizar acerca del estado de salud del jugador: "Tras sufrir una lesión en el segundo periodo de esta noche, el defensa Erik Brannstrom está consciente, puede usar sus extremidades y ha sido trasladado a un hospital local para seguir su evaluación", comunicó el equipo de Ottawa.
Por suerte, parece que el sueco se encuentra fuera de peligro, pero los aficionados y todos sus compañeros se llevaron un gran susto en pleno partido.