Correr una maratón siempre supone llevar al cuerpo humano al límite de sus posibilidades incluso para los atletas más preparados para ello. Este pasado fin de semana se celebró el Maratón de Nueva York, el último 'major' de 2023, y lejos del sabor de las victorias de Tamirat Tola y Hellen Obiri, la prueba dejó una imagen de lo más impactante.
El protagonista fue Adam Kszczot, un exatleta que se retiró el año pasado del deporte profesional y que decidió probar suerte en esta larga distancia. El polaco dejó la alta competición con seis medallas de oro en los Europeos en la disciplina de los 800 metros, así que el cambio al gran fondo le pasó factura.
Cuando Kszczot estaba a punto de cruzar la línea de meta en este Maratón de Nueva York, comenzó a sentir calambres y su manera de correr cambió drásticamente. A escasos metros de finalizar la prueba, tuvo que detenerse porque los calambres le dejaron absolutamente 'tieso', sin poder dar un paso más.
Las piernas del polaco flojearon de tal forma que tuvo que echarse al suelo, incapaz de dar un solo paso más, y en ese momento otros atletas que pasaban a su lado en ese preciso momento se pararon para comprobar cómo se encontraba. Un gran gesto, ya que cualquiera quiere firmar una buena marca en esta prestigiosa carrera.
Entre dos atletas, una mujer y un hombre, auxiliaron al exatleta profesional, le ayudaron a reincorporarse y le acompañaron en los pocos metros que restaban para cruzar la línea de meta. Gracias a esta gran ayuda, Kszczot firmó un tiempo de 2:50.09, y en sus redes sociales explicó el momento: "Me levantaron del suelo dos veces, pero me recordaba todo el tiempo: lucha hasta el último metro".
Un palmarés envidiable
Adam Kszczot, nacido en 1989, fue campeón de Europa de los 800 metros al aire libre en 2014, 2016 y 2018. Sus éxitos también llegaron en pista cubierta porque se llevó el oro en los Europeos de 2011, 2013 y 2017.
En la distancia de los 800 fue uno de los grandes atletas de la pasada década ya que también se colgó dos medallas de plata en los Mundiales. En 2015, en Pekín, fue segundo, mismo puesto que logró dos años más tarde en el Campeonato del Mundo de Londres.
En pista cubierta, de hecho, logró hacerse con el oro en 2018 en los Mundiales de Birmingham, mientras que en 2014 fue plata y en 2010, en Qatar, se hizo con la presea de bronce.