Los Europeos de atletismo comenzaron con una noticia para olvidar dentro del equipo español. Laura Garcia-Caro, corredora de los 20 km marcha, perdió el bronce en su prueba por culpa de celebrar su tercer puesto antes de cruzar la línea de meta.

Una imagen increíble ya que la onubense lo tenía todo para finalizar en el tercer cajón del podio. En los últimos metros comenzó a celebrar su proeza, pero no se dio cuenta de que la ucraniana Lyudmila Olyanovska le recortaba distancias a pasos agigantados. A falta de cinco metros la española fue superada dejándole una cara de incredulidad ante lo que acababa de suceder.

La alteta andaluza enfiló la última recta con una sonrisa en su boca a pesar del titánico esfuerzo realizado durante los 20 kilómetros. Tenía el premio a su alcance, tan solo le quedaban unos metros para conseguir un puesto en el tercer cajón del podio. Sin embargo, pecó de exceso de confianza y acabó dejando una imagen que ha dado la vuelta al mundo.

Con evidentes signos de cansancio, la española levantó los brazos cuando quedaban solo unos metros para la línea de meta y en ese momento, Olyanovska le adelantó para chasco de García-Caro, que se quedó con cara de circunstancias.

Con todo, la actuación de España en primera final del campeonato ha sido muy buena en términos globales ya que las tres marchadoras de la selección han llegado en el top-ten. En concreto, Cristina Montesinos ha sido sexta y Raquel González, novena.

Su confesión

"En la última vuelta estaba bastante reventada y he intentando esprintar con lo que me quedaba porque quería llegar con las mayor ventaja posible a los últimos metros. Sí que es verdad que a falta de 300 y 200 metros iba mirando atrás porque sabía que la llevaba relativamente cerca, pero en el 100 he vuelto a mirar y veía que le llevaba 40 ó 50 metros y ya pensaba que no me pillaba. Y bueno, no la vi venir y pensaba que ya lo tenía", ha declarado una Laura completamente apesadumbrada a la prensa española presente en Roma.

"Yo ya estaba focalizada en llegar y aunque sé que se me ve celebrar en realidad lo iba dando todo. No se si me confié pero en el último 400 iba dándolo todo y mirando atrás", repetía una Laura que no era capaz de digerir este amargo trago, por más que su carrera hubiera sido espléndida.

"No estoy nada contenta con este final y espero que en otra ocasión sea distinto. He competido bien, he dado todo y llevo una temporada espectacular más allá de este accidente. He pasado un año y medio bastante malo y he conseguido darle la vuelta luchando con todas mis fuerzas. Ahora espero aprender de este error y seguir trabajando para volver más fuerte", concluía