Después de meses de preparación, de largas jornadas de trabajo y de intercambio de declaraciones para tratar de demostrar quién es más fuerte de los dos, habrá combate. Tanto Ilia Topuria como Max Holloway superaron el pesaje, la prueba previa para entrar dentro de los estándares exigidos, y se citarán mañana por la noche.
El primero en pasar por la báscula fue Ilia Topuria. El campeón también fue para eso el mejor y quiso mandar un nuevo mensaje a su rival incluso en los detalles más pequeños. Sus 65,8 kilos le confirmaron como apto para pelear en el 'main event' de la UFC 308.
Posteriormente fue Holloway el que superó también el pesaje con una precisión milimétrica. El mismo peso para el norteamericano, 65,8 kilos, así que en ese momento ya quedó claro que el combate ya era un hecho que el cara a cara se producirá en el octógono.
Topuria ha llevado más a rajatabla que nunca el control de su peso antes de este combate en el que defenderá el título ante Holloway. De hecho, su equipo ya confirmó que en la noche anterior al pesaje, el luchador ya se encontraba dentro de los parámetros exigidos, algo que nunca había conseguido hasta la fecha. Una muestra más de la concentración y del foco que tiene el hispano-georgiano en este duelo.
Inmediatamente después de realizar el pesaje, comenzó el proceso de rehidratación para Ilia Topuria. Al bajarse de la báscula comenzó un plan medido también al milímetro por su equipo médico con el que ganará hasta unos 10 kilos en poco más de 24 horas hasta que llegue la pelea.
El plan es que llegue al combate pesando unos 76 kilos. A través de bebidas de rehidratación, de líquidos con electrolitos y sales minerales, el cuerpo de Topuria recuperará lo perdido en las últimas horas para estar a punto en el momento de medirse a Holloway.
El campeón del peso pluma de la UFC defiende este sábado por primera vez el título de campeón y lo hace ante Max Holloway. Topuria sigue invicto en la jaula con un balance de 15-0 y parte como el gran favorito en las apuestas para llevarse una nueva victoria ante un rival norteamericano que tiene un registro de 26-7.
Su preparación para este combate, tal y como le ha contado el equipo de Topuria a EL ESPAÑOL durante toda la semana, comenzó en abril. La confianza en su victoria es total, y de hecho sus entrenadores van todavía más allá: "Los deberes están hechos. Tanto que ha hecho deberes de cara al siguiente combate tras el de Holloway", dicen en su equipo.