Rafa Nadal jugará el domingo la final del torneo de Pekín tras derrotar en dos sets (7-5 , 6-3) sobre pista dura al que ha sido su 'bestia negra' durante este curso, el italiano Fabio Fognini. No cuenta con mejores precedentes frente al que será su rival por el trofeo, Novak Djokovic. "Sé que Novak, hoy por hoy, no es de mi liga porque está en un nivel diferente. Por eso intentaré divertirme e intentar jugar de la manera que quiero jugar, luego ya veremos", reconoció Rafa Nadal sobre la final que afrontará.

El encuentro entre Fognini y el español, número ocho del mundo, comenzó con cuatro 'breaks' en los cinco primeros juegos, por lo que la diferencia entre ambos tenistas fue mínima y la emoción por conocer el ganador de la primera manga llegó hasta el final. Fue entonces cuando el manacorí logró una nueva rotura de servicio, la tercera en total, y con un ajustado 7-5 se hacía con el set.

En contrapunto con este primer parcial, en el segundo ambos tenistas se hicieron fuertes en su saque y solo hubo un quiebre, el que conseguía Rafa Nadal en el segundo juego. A partir de ese momento, el tenista español manejó muy bien su ventaja y disfrutó de varias bolas de partido.

Nadal, de una bestia negra a otra

En el sexto juego de la manga, el balear dispuso de dos bolas de partido ante el saque de Fognini, aunque no consiguió hacerlas efectivas. En el siguiente juego se enfrentó a la primera situación complicada con una pelota de 'break', pero la solventó y llegó a sumar su tercera bola de partido. El italiano se aferraba al encuentro como podía.

Fue en la cuarta oportunidad que tuvo para cerrar el encuentro cuando con un gran saque y una posterior derecha dominante consiguió la victoria y el pase a la final. Con esta victoria, Nadal accede a la final de este torneo por tercera vez en sus cinco participaciones, y además ascenderá al número seis del ranking en el camino a las ATP World Tour Finals de Londres, superando al japonés Kei Nishikori, que cayó derrotado en las semifinales de Tokio.

El italiano Fabio Fognini es uno de los cuatro jugadores que ha logrado vencer a Nadal tres veces en una misma temporada, y se tendrá que conformar con seguir en ese grupo. De conseguir la victoria hubiese sido, junto a Djokovic, uno de los dos tenistas que hubiese conseguido hasta cuatro victorias frente al manacorí.

Por su parte el alicantino David Ferrer cayó ante el máximo favorito, Djokovic, que se impuso por 6-2 y 6-3. El serbio, que jamás ha perdido un partido en Pekín, torneo que ha ganado en cinco ocasiones, se amparó hoy en su potente saque y en un juego sin apenas errores desde el fondo de la red para ir medrando la confianza del de Jávea, quien llegó a romper el servicio del serbio en dos ocasiones pero nunca amenazó al juego de "Nole".