España pasa el trámite ante Rumanía y ya tiene el pase para la fase final de la Copa Davis. El equipo dirigido por Sergi Bruguera ganó 3-1 la eliminatoria disputada en Marbella y que quedó encarrilada en la jornada del viernes con las victorias individuales de Roberto Bautista y el debutante Carlos Alcaraz. Ya el sábado, el dobles cayó por sorpresa y Bautista tuvo que volver a saltar a la pista para rematar la faena.
Victoria contundente de Bautista contra el rumano Marius Copil. El tenista castellonense se impuso por la vía rápida, en dos sets (6-2 y 6-3), a un tenista que el día anterior cayó derrotado ante Alcaraz y en el dobles salió victorioso junto a Tecau.
Bautista estaba obligado a sentenciar ya que si no la eliminatoria se iba a un partido a vida o muerte para el que hubiera jugado Alcaraz. El equipo rumano de la Copa Davis ganó el tercer partido de la eliminatoria en dos sets, por 7-6 (2) y 6-4, con un gran nivel de Horia Tecau y Marius Copil frente a los españoles Alejandro Davidovich y Pedro Martínez, que debutaron sin poder cerrar el pase a la fase final.
Derrota en dobles
Rumanía fue mejor en el dobles del clasificatorio de la Copa Davis y pudo recortar distancias en el resultado global (2-1), en un primer set muy igualado que se resolvió en el 'tie break' y una remontada en el segundo, donde pasaron del 4-1 al 4-6 y dejaron sin opción a Davidovich y Martínez.
Marius Copil y Horia Tecau, este último experto en dobles (fue número dos del mundo), se toparon con una pareja muy fiable: Alejandro Davidovich y Pedro Martínez mandaron desde el principio con un gran Davidovich en la red (2-0).
La derecha de Copil, que ya demostró ante Alcaraz que su saque puede poner en apuros a cualquiera, puso a tono a Rumanía con el 3-2, en bolas con demasiada precipitación del dúo español.
Rumanía se creció en el sexto y séptimo juego de partido (3-4) con un Copil muy enchufado, alzando el puño dirigido a la treintena de aficionados rumanos de la grada de la pista marbellí.
Con Pedro Martínez subiendo a la red y haciendo de pared a los golpes de Tecau, el equipo español logró empatar, pero hubo demasiado riesgo en puntos donde se pudo asegurar más y el 4-5 dejaba a Rumanía cerca de anotarse el primer set.
Así, llegó la respuesta mutua: dos juegos en blanco para España, otro para Rumanía y al todo o nada del 'tie break', donde los de Sergi Bruguera fueron inferiores.
Con un set abajo y la obligación de remontar por primera vez en la eliminatoria, Martínez y Davidovich encontraron su mejor versión e impusieron el 3-0, pero los rumanos respondieron desde la experiencia y el 4-4 llegó tiempo después.
El gran resto de Copil y su entendimiento con Tecau, venidos arriba en lo anímico, certificó lo que parecía improbable: pasar del 4-1 al 4-6 final