La carrera de Roger Federer llega a su final. El tenista suizo anunció recientemente en un emotivo comunicado que dejaba el tenis profesional ante el calvario de lesiones que viene sufriendo en los últimos años y que, si el cuerpo le respeta, la Laver Cup será su último torneo como jugador en activo. Sin embargo, su participación en esta competición no está para nada clara y las dudas sobre si podrá despedirse a lo grande son cada vez mayores.
Su preparador físico, Pierre Paganini, en una entrevista con el diario suizo Blick sembró la incertidumbre entre todos los aficionados al afirmar que su presencia en las pistas en esta Laver Cup "será probablemente una decisión de último momento". Paganini contó que el tenista suizo estaba entrenando en las últimas jornadas, de manera que pudiera obtener toda la información y las sensaciones posibles acerca de su estado físico y que, en función de ello, confirmaría su presencia o la descartaría.
El mundo del tenis al completo se encuentra en vilo y esperando el anuncio de Roger Federer ya que el arranque de la Laver Cup es inminente. Este torneo, en el que se enfrenta el equipo de Europa ante el resto del mundo, se disputa este fin de semana entre el viernes 23 y el domingo 25 en el O2 Arena de Londres y ha levantado unas expectativas altísimas por el cartel de los participantes. No solo se despide Federer, sino que sus compañeros de equipo y también rivales han convertido esta Laver Cup en una cita imperdible.
En el conjunto europeo acompañarán al suizo, si finalmente participa, Rafa Nadal, Novak Djokovic y Andy Murray, tenistas que han marcado de manera conjunta una época. También formarán parte de este combinado Casper Ruud, número 2 del mundo, y el griego Stefanos Tsitsipas, mientras que Berretini será el suplente que entraría en el caso de que Federer no esté. Enfrente, en el equipo del resto del mundo estarán Taylor Fritz, Aliassime, Schwartzman, Frances Tiafoe, Alex de Miñaur y Jack Sock.
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Reventa a 40.000 euros
Nadie se quiere perder el adiós de Roger Federer al tenis profesional y la locura por estar presente en el O2 Arena de Londres se desató hace días. Tanto, que las entradas ya están agotadas por completo en los puntos de venta oficiales y tan sólo es posible hacerse con un pase en la reventa y en sitios no oficiales.
Si la organización del torneo había fijado en un inicio en torno a los 500 euros el precio de las entradas más caras para la sesión del sábado, a priori la más interesante, en la reventa un pase para esta misma jornada asciende hasta los 44.500 euros, lo que demuestra el fervor que se ha desatado por el adiós de Roger Federer.
Los aficionados tienen muchas ganas de ver una última vez al tenista suizo en acción. Las lesiones han lastrado en los años más recientes a Federer hasta límites insospechados y su ausencia en las pistas es prolongada. Tanto, que su último encuentro oficial data de hace más de un año, cuando disputó la edición de 2021 de Wimbledon.
Aquella vez, Roger pudo disputar un total de cinco partidos hasta caer en los cuartos de final ante el polaco Robert Hurkacz en tres sets por la vía rápida. La hierba londinense fue testigo del que, hasta el momento, es el último partido oficial de la carrera del mito helvético, y todos esperan que el círculo pueda cerrarse en Londres y que esta vez sea el O2 Arena el que le dé el adiós definitivo a Federer.