España cayó eliminada en los cuartos de final de la Copa Davis por la vía rápida al perder por 2-0 ante Croacia. Pese a jugar como anfitrión en Málaga, Roberto Bautista primero y Pablo Carreño después sucumbieron ante Borna Coric y Marin Cilic respectivamente, por lo que los croatas se colaron en las semifinales y dejaron sin opciones de título a España.
Roberto Bautista puso fin a su racha con la selección nacional. En su duelo contra Borna Coric se ponían en juego dos circunstancias muy potentes. Un jugador que le había ganado sus últimos tres partidos entre ambos y una competición en la que llevaba tres años sin caer. Finalmente, Croacia sumó el primer punto de la serie y España se pasó a quedarse sin red en la Copa Davis.
Coric fue mucho Coric en un partido que tuvo bajo su control en todo momento. Bautista lo intentó todo, especialmente en un segundo set que se fue hasta el tie-break, pero el gigantón balcánico no le dio ninguna opción al jugador de Castellón. El croata se llevó la primera manga por 6-4 y en la segunda supo asestar el golpe definitivo en una muerte súbita en la que rindió a un nivel más alto que el número uno del equipo de Sergi Bruguera.
Más allá de lo puramente deportivo, un hecho inesperado interrumpió este primer partido de la serie.El choque entre Roberto Bautista y Borna Coric tuvo que ser interrumpido durante unos minutos por un problema con dos espontáneos que se encadenaron a la red de la pista.
Coric se muestra intratable
El partido entre Bautista y Coric arrancó con una declaración de intenciones del balcánico. El español tuvo que luchar durante siete minutos para sacar su primer servicio adelante en el que Borna ya tuvo sus primeras opciones de rotura. Desde ese momento, el castellonense supo que la tarde iría cuesta arriba. La grada del Martín Carpena de Málaga apretaba y él se animaba, pero nada más lejos de la realidad.
Los siguientes juegos fueron algo más tranquilos para ambos jugadores, pero con empate a tres en el marcador llegó el momento clave. Coric puso contra las cuerdas a Bautista atacándole en sitios incluso inesperado. El gigante croata dominaba los intercambios más largos y Bautista, descolocado, subía a la red para intentar terminar los puntos que no ganaba desde el fondo. En una de esas subidas erróneas se consumó la rotura.
Coric, armado con un saque potente que superaba ampliamente los 200 kilómetros por hora, consiguió hacerse fuerte en la recta final de la primera manga para cerrar la victoria parcial sin que Bautista pudiera poner oposición. El ganador del Masters 1000 de Cincinnati recuperó su mejor versión y cerró el primer set con solvencia.
En el segundo set, el partido no varió aunque Bautista consiguió aguantar la lucha hasta el final. Volvió a salvar varias pelotas break en el inicio y subió su nivel tenístico para impedir que el croata pusiera la directa rumbo al triunfo. Sin embargo, el cañonero balcánico estaba intratable y era imposible hacer frente a su poderío y a su efectividad con la derecha.
Terminó el partido con 12 saques directos y ninguna doble falta. Una fiabilidad espectacular que llevó a sumar hasta 27 golpes ganadores. Un auténtico ciclón. A pesar de eso, Roberto Bautista tuvo sus oportunidades, como en el 5-5 cuando dispuso de bola break. Sin embargo, Coric superó su único momento de debilidad y en la muerte súbita se terminó llevando el triunfo por 7-3. Bautista había salvado las dos primeras bolas de partido con 6-2, pero a la tercera sucumbió mientras padecía los problemas de hombro que le han lastrado durante la recta final de este 2022.
Carreño tampoco puede
Después llegó el turno para Pablo Carreño, que tenía que ganar para forzar el tercer partido. Sin embargo, enfrente tenía a un complicado Marin Cilic que planteó mucha batalla. El choque fue igualado, se fue incluso al tiebreak del tercer set pero terminó cayendo del lado del croata por 5-7, 6-3 y 7-6 (5).
En ese desempate definitivo, Carreño empezó brillante. Sobrepasó a Cilic en la red y le dejó clavado al fondo de la pista, incapaz de devolver sus paralelos. Se puso con 4-1, pero fue incapaz de mantener el nivel. Tres puntos seguidos del rival le abrieron el camino para ponerse con ventaja de 6-5. Un golpe que se le fue largo a Carreño convirtió su primer punto de partido en un pasaporte a semifinales.
Ni la igualdad que mantuvo Bautista con Coric hasta los compases finales del primer partido, ni la lucha de Carreño hasta el desempate del tercer set, ni el apoyo de la grada en un Martín Carpena lleno (9.486 espectadores sobre un aforo de 9.800) y entregado a una causa cada vez más imposible. Nada fue suficiente para conducir a España al menos a semifinales. Será el equipo croata el que las juegue el viernes contra Australia.