Novak Djokovic es uno de los grandes favoritos, por no decir el que más, que sigue en liza en el Open de Australia. El ganador de nueve veces en Melbourne no está encontrando sus mejores sensaciones y dejó entrever en su victoria frente Grigor Dimitrov nuevos problemas.
Sabido es que el estado del serbio no está en su mejor estado y que las molestias se están haciendo efectivas cada vez que salta a la pista. Frente al búlgaro volvió a recurrir a los servicios médicos para tratarse durante el partido, por lo que las alarmas vuelven a estar encendidas.
Y el propio Djokovic lo reconoció en la rueda de prensa posterior a su partido. En ella dejó entrever que está sufriendo cada vez que salta a pista y que los dolores le martillean una y otra vez cuando los efectos de los fármacos que toma desaparecen. Un suplicio en este Open de Australia al que se enfrenta el exnúmero 1 del mundo.
"Es como una montaña rusa, primero las pastillas y cremas hacen su efecto, pero cuando dejan de hacerlo. Tengo que jugar con mucha energía, física y mental, para manejar esto y controlar al rival", declaraba tras su victoria en tres sets frente a Grigor Dimitrov en la tercera ronda del primer Grand Slam de la temporada.
Un grave problema en su camino para intentar alcanzar la décima victoria en Australia, donde ha sido el gran dominador siempre y cuando las condiciones le han permitido participar. "Jugar así requiere mucha energía por mi parte de forma mental y física, lidiar contra mi rival en una condición física que no es la idea", añadía el serbio.
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En la siguiente ronda se enfrentará a Alex de Miñaur, una de las grandes esperanzas locales. "Va a ser un gran reto jugar contra un australiano delante de su gente. La atmósfera será eléctrica y él estará motivado por intentar llevarse la victoria. El hecho de que nunca nos hemos enfrentado es un reto tanto para él como para mí.", añalizó sobre el próximo partido.
Críticas a los horarios
Una de las grandes polémicas de este Open de Australia ha sido las larguísimas jornadas del torneo, que se alargaban hasta la madrugada. Djokovic también apoyó las críticas realizadas por Andy Murray contra la organización y se mostró contrario a ellas, ya que influyen en su rendimiento.
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"Creo que para el público es divertido y motivador el hecho de tener partido en la medianoche o a la 1, 2 o 3 am. Pero para nosotros es agotador. Incluso ganando al día siguiente tienes que volver. Tu tienes tu ciclo del sueño, el ritmo se interrumpe completamente, no es tiempo suficiente para recuperarte de un partido a cinco set", reflexionó Djokovic.