La soledad de Novak Djokovic. Si bien parecía que Rafa Nadal llegaría para competir en este Abierto de Australia, que arranca el domingo, una lesión de la que se quiere proteger se lo impidió. De esta manera, será la primera vez para el tenista serbio que compita en el major australiano sin presencia del español o de Roger Federer.
Hace tiempo que el cambio de era en el tenis mundial es una realidad, pero Djokovic se resiste todavía. Y de qué manera, ya que viene de completar uno de los mejores años de su carrera con su victoria en tres Grand Slam (Australia, Roland Garros y US Open), además de ser finalista en el restante (Wimbledon), y arrasar en el ranking de la ATP como número 1.
Sin embargo, Djokovic cumplirá 37 años en 2024 y va dando pistas de un desgaste, tanto físico como emocional, que podría apartarle del circuito en un futuro no muy lejano. Se parte de la base de que para este año, más que empezarlo con la defensa de la corona del Abierto de Australia, Nole tiene marcados menos objetivos que nunca.
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Nole verbalizó esta semanas sus dudas: "He empezado este año, como normalmente hago, en Australia. Me encanta jugar aquí y he tenido aquí los mayores éxitos de mi carrera a nivel de Grand Slam. ¿Qué haré después? No lo sé", dijo en una entrevista para un medio de su país.
"Normalmente, tengo que aclarar dónde quiero ir, cuáles serán los objetivos, y sé que los objetivos siempre son los Grand Slam y los Juegos Olímpicos. Aparte de ellos, no sé que torneos jugaré", añadió.
Sin calendario definido
Es decir, por la cabeza de Djokovic no pasa más que intentar agrandar su leyenda como la figura con más Grand Slam ganados en la historia (lleva 24) y pelear por última vez en París por ese oro olímpico que siempre se le ha resistido. Más allá de eso, confiesa, no lo tiene nada claro.
Es un signo claro del cansancio que llega a afectar, incluso, a un deportista de su talla tras tantos años de carrera. Djokovic, al contrario de otros años y como suelen hacer el resto de tenistas, todavía no ha confirmado su participación en ningún torneo más del calendario. Se hace varias preguntas: "¿Cuánto debería seguir jugando? ¿Cuántos torneos debería jugar? ¿Vale la pena?".
Detrás hay una razón personal y otra física. La primera es sencilla: cree que va siendo hora de pasar más tiempo con su familia: "Si soy honesto, estoy dividido sobre cuándo parar y cuándo jugar. Siempre hay una parte de mí que es un niño que adora jugar al tenis y que solo piensa en tenis... y ese niño aún quiere seguir adelante. Pero, por otra parte, soy padre de dos críos y estoy lejos de mi familia, y cada vez que viajo por un largo periodo de tiempo me rompe el corazón", aseguró en esa misma entrevista.
En su cabeza sigue estando la idea de ganar, pero esta cada vez tiene menos peso en su lista de prioridades: "Estoy hambriento, aún quiero competir, puedo correr durante horas, afortunadamente, pero es más un tema emocional, como cuál es la prioridad. El tenis ha sido la prioridad durante 30 años y no quiero perderme más momentos con mis hijos".
En este último mensaje, Djokovic también saca pecho de su estado de forma a su edad. Es cierto que, comparado con Nadal, no ha tenido tantas lesiones hasta este punto. Un claro ejemplo es que, sin contar con retiradas en un torneo, Rafa se ha perdido 16 Grand Slam en su carrera por lesiones y Nole solo uno.
Problemas en la muñeca derecha
Djokovic tampoco es dado a mostrar signos de debilidad antes de un torneo importante, como este Abierto de Australia, pero en su preparación para la cita de Melbourne ha pasado por ciertos apuros. La zona dañada es su muñeca derecha, zona en la que estaba dolorido mientras jugaba la United Cup la pasada semana.
Goran Ivanisevic, entrenador de Djokovic, intentaba ser optimista sobre la lesión de su pupilo: "Lo más importante es que estará listo para competir en Melbourne en diez u once días. Tiene ese problema en la muñeca, pero no es importante. El objetivo era jugar unos cuantos partidos y así lo ha hecho, así que la preparación fue positiva. Creo que De Miñaur estuvo muy bien tácticamente. Nos vamos a tomar unos días de descanso antes de volver a entrenar", dijo.
Djokovic se ha estado divirtiendo en estos primeros días de tenis en Melbourne con exhibiciones, sin dar signos de dolor. La verdadera prueba será en su debut, prevista para el domingo o el lunes, y contra un rival que llegará procedente de la fase previa. En dos días Nole comienza la defensa de su corona, con Carlos Alcaraz como gran amenaza y sin certezas sobre lo que vendrá después.