Primer trámite solventado para Carlos Alcaraz. El tenista murciano comenzó con buen pie su defensa del título en Wimbledon y demostró por qué el año pasado fue capaz de triunfar sobre la majestuosa hierba de Londres. [Así vivimos la victoria de Carlos Alcaraz ante Mark Lajal en Wimbledon]
El español se impuso en tres sets, por la vía rápida, al estonio Mark Lajal y no dio opción alguna a la sorpresa en esta primera ronda. Pese a que tuvo que recurrir al tiebreak en el primer set, algo habitual en esta superficie hasta para los mejores, Carlitos demostró tener la situación bajo control en todo momento y la tercera manga ya fue coser y cantar para él.
Ahora Carlos Alcaraz espera a conocer a su rival en la segunda ronda de Wimbledon con la tranquilidad de tener los deberes hechos. Su próximo contrincante saldrá del duelo entre Vukic y Ofner, por lo que el arranque de torneo seguirá siendo sobre el papel bastante benévolo con el actual número 3 del mundo.
De menos a más
Nunca es fácil el primer contacto con una superficie que impone tanto como la hierba de Wimbledon. Tras una preparación fallida en el torneo de Queen's, donde fue eliminado en la segunda ronda, había ciertas dudas sobre la versión que mostraría Carlos Alcaraz en este Grand Slam, pero no falló.
El partido salió muy disputado en los primeros juegos, y eso fue cargando de confianza a Lajal, que fue capaz de conseguir el primer break en el quinto juego del primer set. Esta rotura fue, sin embargo, replicada inmediatamente por Carlos Alcaraz, que no quería ningún tipo de sorpresas.
Nadie fue capaz ya de volver a estirarse en el marcador, así que esta primera manga se tuvo que decidir en el tiebreak. Ahí, en el momento de la verdad, fue cuando Carlitos apretó el acelerador y con un claro 7-3 se impuso para apuntarse el primer paso hacia la segunda ronda de Wimbledon.
Lejos de hundir a Lajal el resultado de este primer set, el segundo lo inició con un break que le hacía soñar con seguir vivo en el partido. Pero de nuevo Alcaraz le puso los pies en el suelo a su rival en el juego siguiente y recuperó el terreno perdido. Parecía que el guion iba a ser el mismo que el del primer parcial, todo se encaminaba al tiebreak, pero el español pegó el zarpazo en el momento justo.
Rompió el servicio de Lajal en el tramo final y se adjudicó el 6-5 que le permitía ganar el set con su saque. Efectivamente no falló, puso la directa y, en blanco, se llevó otro juego que le hizo ponerse 2-0 arriba.
El tercer set no tuvo demasiada historia. Lajal, que se fue al vestuario, salió derrotado a la pista, consciente de que ya no tenía nada que hacer ante un rival muy confiado. El 6-2 final fue el fiel reflejo de la diferencia entre ambos que terminó con el pase de Carlos Alcaraz a la segunda ronda de Wimbledon.