Rafa Nadal, durante su partido contra Leo Borg.

Rafa Nadal, durante su partido contra Leo Borg. EFE

Tenis

Rafa Nadal empieza con buen pie el Open de Suecia con una cómoda victoria contra Leo Borg

El español, que ayer venció en su estreno en dobles con Ruud, ha demostrado de nuevo buenas sensaciones en el cuadro individual.

16 julio, 2024 17:50

Rafa Nadal continúa con su puesta a punto de cara a los Juegos Olímpicos. El tenista español debutó en el cuadro individual del ATP 250 de Suecia con una sólida victoria frente al sueco Leo Borg (6-3, 6-4), hijo del legendario Björn Borg.

Apenas tuvo oposición el jugador balear. Muy sólido en su servicio y sin la necesidad de exprimirse al máximo no cedió ningún break y le bastaron un par de roturas para lograr el triunfo en una hora y media de partido. Ahora le espera Norrie quien también se llevó sin problemas su enfrentamiento contra Kovalik.

Nadal buscará seguir encontrando buenas sensaciones y ritmo de juego para llegar preparado a la cita de París. El español está cargando sus piernas para coger buena forma y es por eso por lo que también está disputando el torneo de dobles. Lo hace con Casper Ruud y están en segunda ronda tras imponerse con comodidad en su debut.

Rafa va a tener que jugar todos los días si continúa avanzando en el torneo. Este miércoles juega la segunda ronda de dobles y el jueves seguirá con su participación en el cuadro individual.

Sin apuros

El partido de Nadal frente al hijo del legendario Björn Borg fue coser y cantar. Desde el inició del choque se mostró mandón y no tardó demasiado en encarrilar la primera manga. Rompió el saque de Borg con 2-1 en el marcador y eso fue suficiente para llevarse el primer set con un sólido 6-3.

Debía reaccionar el 461 del ranking mundial, pero no lo hizo y a las primeras de cambio volvió a ceder en su saque y el encuentro se le puso muy cuesta arriba. Nadal no mostró flaquezas al servicio y precintó sin problemas el duelo ante el tenista sueco. 

Ni siquiera dejó una opción de bola de break que diera algo de emoción al choque. Borg, impotente, no pudo ofrecer un nivel de juego que hiciera daño al tenista balear. Se marchó del torneo sin premio y con la sensación de tener todavía un largo camino por recorrer.