Carlos Alcaraz lleva tres años enfrentando obstáculos para tener su momento en la Copa Davis, un torneo con más de 120 años de historia. Desde su frustrado debut en 2021, cuando la Covid lo dejó fuera del equipo español en el último momento, hasta las lesiones y decisiones personales que lo han mantenido al margen, el joven tenista de El Palmar no ha tenido la oportunidad de consolidar su papel en esta competición.
El 2021 fue un año prometedor para Alcaraz. Después de alcanzar sus primeros cuartos de final en un Grand Slam en el US Open, se perfilaba como la principal esperanza de España en la Davis. Sin embargo, justo antes de su debut con la selección, un positivo por Covid truncó sus planes. España, sin su joven estrella, quedó eliminada en la fase de grupos tras una dolorosa derrota ante Rusia. La ausencia de Alcaraz dejó un hueco en el equipo, y el país no pudo pasar a las finales.
Tras conquistar el US Open en 2022 y coronarse como número uno del mundo, la fatiga acumulada por una exigente temporada pasó factura a Alcaraz en la fase de grupos de la Davis. A pesar de perder ante el canadiense Félix Auger-Aliassime, ganó al surcoreano Soonwoo Kwon y España pasó a las finales, las últimas que ha disputado. Pero una rotura abdominal le dejó en el dique seco el resto del año y el equipo español caería en cuartos ante Croacia.
La historia se repetiría al año siguiente. Alcaraz, que en marzo pudo debutar con España en la ronda clasificatoria, decidió priorizar su estado físico a final de temporada y no participar en la fase de grupos de la Copa Davis en 2023. Su ausencia se notó, y España volvió a sufrir. El equipo cayó ante la República Checa y Serbia, y solo consiguió superar a Corea del Sur, quedando fuera de los cuartos de final al terminar en la tercera posición del grupo.
Por tres años seguidos, Carlos Alcaraz no ha podido participar en las fases finales de la Davis, una situación que ha generado cierta presión en el joven tenista. Sin embargo, este 2024, tras su temprana eliminación en el US Open, donde cayó en segunda ronda ante el neerlandés Botic van de Zandschulp, Alcaraz ha tenido tiempo para descansar y preparar con dedicación su participación en la Copa Davis. Esta nueva oportunidad representa para él un punto de inflexión.
"Ahora mismo me siento bien, motivado para jugar la Davis en casa. Tengo muchas ganas de sentir el cariño de la gente, de vivir otra Copa Davis, ya que no he podido jugar muchas. Mentalmente estoy con muchas ganas y motivado para seguir mejorando. Físicamente he hecho un buen trabajo desde que perdí en Nueva York para estar a un nivel óptimo para afrontar la Davis y lo que viene", confesaba Alcaraz en una rueda de prensa previa a su participación en la fase de Valencia.
El reto que tiene ante sí no es menor. La historia de la Davis está llena de grandes nombres del tenis español, como su propio entrenador, Juan Carlos Ferrero. El extenista valenciano es una figura clave en la historia de la Copa Davis para España. En el año 2000, cuando solo tenía 20 años, fue el encargado de darle a España su primera 'Ensaladera', tras ganar el partido decisivo en la final ante el australiano Lleyton Hewitt.
Aquel fue un debut soñado para el joven Ferrero, que se desplomó sobre la tierra batida del Palau Sant Jordi en Barcelona tras lograr la victoria. Esa generación, compuesta también por Àlex Corretja, Albert Costa y Joan Balcells, fue la encargada de poner a España en el mapa del tenis internacional en la Davis.
Ferrero no solo brilló en esa ocasión, sino que continuó ganando la Copa Davis en dos ocasiones más, en 2004 y 2009, aunque en esta última no participó en la final. Su legado en el torneo es algo que Alcaraz tiene muy presente, y la presión de emular a su mentor es evidente. Sin embargo, a sus 21 años, el joven murciano está decidido a construir su propio camino en la competición y eso requiere un cambio de 'chip'.
La relación de Alcaraz con los finales de temporada ha sido complicada. Después del US Open, su rendimiento ha sido algo irregular en los últimos años. Ya en 2021, su desempeño tras Flushing Meadows mostró altibajos, aunque ese año logró ganar los cinco encuentros que jugó en las Next Gen ATP Finals, un torneo que reúne a las jóvenes promesas del tenis mundial.
En 2022, su balance fue de seis victorias en diez partidos, y una lesión le impidió disputar las Nitto ATP Finals, para las que estaba clasificado como número uno del mundo. En 2023, ganó siete de sus 12 últimos partidos de la temporada, incluyendo victorias en el ATP 500 de Pekín y el Masters 1000 de Shanghái, pero también sufrió derrotas en el Masters 1000 de París-Bercy y las ATP Finals.
El reto de Alcaraz ahora es liderar al equipo español en la fase de grupos de la Davis en Valencia, donde competirán contra Australia, Francia y la República Checa. España debuta este miércoles 11 de septiembre, y la misión del equipo será acceder a la 'Final a Ocho', que se disputará más adelante. Con un récord de 194-52 en el circuito y un porcentaje de victorias del 78,6%, Alcaraz tiene todas las herramientas para triunfar, pero los finales de temporada han sido su talón de Aquiles.
El joven tenista murciano tiene el objetivo claro: ser parte de la historia de la Davis, un torneo que ha visto pasar a grandes campeones. Con la ayuda de su entrenador y la experiencia acumulada en los últimos años, Alcaraz busca dejar atrás los obstáculos que lo han mantenido al margen y liderar a España hacia una nueva 'Ensaladera', la séptima. ¿Será 2024 el año en que Alcaraz logre finalmente dejar su huella en la Copa Davis?