A Marcel Granollers y Pedro Martínez no les da tiempo a celebrar su victoria cuando ya tienen encima a todos los integrantes del equipo español de la Copa Davis. En ese momento se acaba una semana impecable, en la que han conseguido el billete para la Final a 8 y han allanado el terreno para dicha final al vencer a Australia (2-1) y asegurarse el liderato de grupo.
Cuando arribaron en Valencia, el objetivo de los de David Ferrer era sacar el billete a Málaga y lo han hecho fuera de la clase turista. Viajarán en business después de que la apuesta saliera a pedir de boca. La remontada de Pablo Carreño ante Jordan Thompson (2-6, 6-2 y 7-6) y el posterior triunfo en dobles de Marcel Granollers y Pedro Martínez sobre la dupla australiana formada por Max Purcell y Matthew Ebden (5-7, 6-4 y 6-4) redondeó una fase clasificatoria que se barruntaba durísima y se ha resuelto de manera impecable.
Las victorias dejaron sin trascendencia la derrota de Pedro martínez en individual ante Alexei Popyrin. A lo largo de los últimos siete días, España ha dejado por el camino a tres potencias después de que en la última edición no lograra superar el corte de septiembre. Atrás queda aquel sin sabor y la República Checa, Francia y la laureada Australia.
En la pelea por conquistar la séptima Ensaladera su historia, España evita a la Italia de Sinner, Musetti, Berrettini y compañía, vigente campeona, y a Estados Unidos. Su rival podría ser la Alemania de Zverev, pero también Países Bajos o Bélgica. En cualquier caso, el panorama es diferente al de la última edición en la que quedaron apeados en la fase de grupos.
Por aquel entonces no estuvieron sobre la pista ni Alcaraz ni Bautista y comenzó claudicando en los dos primeros cruces. Direcctión completamente opuesta a la tomada este año, cuando únicamente han cedido dos puntos. El dobles ante Francia y el mencionado en individual contra Australia.
Un impecable desempeño que guía a España a la Final a 8 junto a Estados Unidos, Canadá, Argentina, Australia, Italia, Alemania y Países Bajos o Bélgica. Al partido decisivo, Granollers y Martínez se presentaron sin experiencia alguna. Nunca habían jugado juntos. Y ante sí tenían a la pareja ganadora de Wimbledon 2022 y finalistas del Open de Australia del mismo años. Casi nada.
Granollers se hizo fuerte en la red y ambos, aunque con algún error fruto de la nula vivencia juntos, precintaron una victoria crucial. España buscaba una dupla titular en dobles y ellos podrían haber cerrado el casting camino a Málaga. España lava su cara de una edición a otra. La séptima, más cerca.