Publicada

La Copa Davis, una de las competiciones más emblemáticas del tenis mundial, experimentará un cambio significativo en su formato a partir de 2025. La Federación Internacional de Tenis (ITF) ha decidido implementar una nueva estructura con el objetivo de recuperar la esencia que hizo del torneo un evento especial y reconocido por su espíritu nacionalista y competitivo.

Este cambio surge después del controvertido período gestionado por Kosmos, la empresa de Gerard Piqué, cuyo contrato rompieron tras solo tres ediciones. Tras esta decisión la organización tomó la decisión de mantener el formato a la espera de encontrar uno nuevo, algo que sucederá en 2025.

El acuerdo entre la ITF y Kosmos en 2019 revolucionó la Copa Davis, transformando su formato clásico de local-visitante en una fase final centralizada con hasta 18 equipos. Sin embargo, esta estructura no logró cautivar a los aficionados, dejando imágenes de gradas vacías y un ambiente que contrastaba con la intensidad de las ediciones tradicionales.

A pesar de los esfuerzos por modernizar la competición, los problemas financieros y la falta de aceptación por parte de jugadores y público llevaron al fin del acuerdo con Kosmos en 2023.

Con este cambio, la ITF asume el desafío de equilibrar tradición e innovación, buscando un formato que preserve el espíritu de la Copa Davis y, al mismo tiempo, se adapte a las demandas del tenis contemporáneo.

Rafa Nadal celebra su victoria este domingo con España en Copa Davis. REUTERS

Un formato renovado

El nuevo modelo eliminará la fase de grupos, considerada una de las principales causas del desinterés en el público. En su lugar, se adoptarán eliminatorias directas desde los octavos de final, con un formato clásico de local-visitante.

Este diseño pretende revivir la emoción de los encuentros en casa y fuera, donde el apoyo del público local y la presión del ambiente hostil han sido históricamente parte del atractivo del torneo.

El calendario del torneo quedará estructurado en tres fases principales:

- Febrero: Qualifiers, eliminatorias de local-visitante en las que los equipos compiten por un lugar en los octavos de final.

- Septiembre: Octavos de final, también con formato local-visitante y partidos al mejor de tres sets.

- Noviembre: Final a Ocho, en una sede neutral, donde los equipos clasificados competirán por el título.

Este cambio permitirá una mayor flexibilidad en el calendario de los jugadores, evitando la sobrecarga tras el US Open, y garantizará una competición más intensa y emocionante.

Una nueva sede

China, y específicamente la ciudad de Zhuhai, ha emergido como la principal candidata para albergar la Final a Ocho a partir de 2026. Esta decisión, que implicaría un contrato multimillonario, sería el mayor evento de tenis en el país desde la polémica en torno a Peng Shuai en 2021 y las suspensiones de torneos debido a la pandemia.

No obstante, trasladar la final a China plantea varios inconvenientes. Para los jugadores, competir en Asia tras finalizar las ATP Finals en Europa supone un reto logístico y físico considerable.

Además, el ambiente en las gradas durante eventos recientes en China ha sido deslucido, un aspecto que la ITF deberá abordar para garantizar el éxito del evento.

Recuperar la esencia

David Haggerty, presidente de la ITF, ha destacado que el nuevo formato busca "mostrar el tenis de clase mundial en más países de todo el mundo y aumentar la conciencia y la participación". Este enfoque pretende no solo revitalizar la competición, sino también expandir su alcance global.

El regreso a las eliminatorias directas y la preservación de una fase final centralizada son esfuerzos por reconciliar la tradición de la Copa Davis con las necesidades del tenis moderno. Aunque el cambio no será inmediato, los ajustes para 2025 y 2026 representan un paso hacia la recuperación de la esencia que hizo de este torneo un icono del deporte.

La Copa Davis encara una nueva etapa en su historia, dejando atrás un modelo que no logró satisfacer las expectativas y apostando por una estructura que combina tradición e innovación.

El reto será mantener el interés de los aficionados, garantizar la participación de las estrellas del circuito y resolver las complejidades logísticas que surjan en el camino.

El 2025 marcará el inicio de esta transformación, una oportunidad para que la Copa Davis recupere su lugar como la "Copa del Mundo del tenis". La historia de este torneo centenario continúa escribiéndose, esta vez con la esperanza de recuperar el espíritu que lo convirtió en un evento inolvidable.