Image: Los desnudos de David Lynch, el fotógrafo tras el cineasta

Image: Los desnudos de David Lynch, el fotógrafo tras el cineasta

Arte

Los desnudos de David Lynch, el fotógrafo tras el cineasta

La Fundación Helmut Newton de Berlín expone por primera vez este tipo de imágenes captadas por el artista en gran formato

14 diciembre, 2018 01:00

David Lynch: Sin título, Los Ángeles, años 1990 © David Lynch

Hace tiempo que David Lynch trascendió el cine, el arte que ha utilizado con mayor éxito en su carrera. Se conoce mundialmente a este creador estadounidense por películas como El hombre elefante, Terciopelo azul, Carretera perdida, Mulholland Drive, y, por supuesto, por ser responsable junto a Mark Frost de la serie de televisión de culto Twin Peaks.

Lynch, sin embargo, es mucho más que un cineasta. Es un artista capaz de dar a su particular universo múltiples expresiones. La fotografía es una de ellas. Lo demuestra la participación de este singular creador estadounidense en la exposición recientemente estrenada Nudes (Desnudos) en la berlinesa Fundación Helmut Newton. La muestra presenta los trabajos de desnudos femeninos de Lynch junto a los de Saul Leiter y del anfitrión del espacio expositivo, Helmut Newton.

Llaman especialmente la atención las fotografías de Lynch porque se trata de la primera vez en que el director de Cabeza borradora expone sus fotografías de desnudos en un gran espacio expositivo. A fin de cuentas, el Museo para la Fotografía de Berlín es la sede de la Fundación Helmut Newton. En este museo, Lynch ya era, de alguna forma, protagonista. En la exposición permanente de la fundación hay una foto de Newton en la que aparecen Lynch e Isabella Rossellini retratados en Los Ángeles, en 1988. La imagen data de los días en que Lynch y Rossellini eran pareja.

"El trabajo que presentamos es algo que resulta de la actividad artística en paralelo que ha desarrollado Lynch desde siempre. Las fotos son una muestra de su universo pues transmiten un ambiente misterioso, como el de sus películas", dice a El Cultural el comisario de la exposición, Matthias Harder. Y tanto. Cualquier amante del universo de Lynch podría identificar sin dudar la autoría del genio estadounidense en las 22 fotografías de gran formato que se exhiben en la Fundación Helmut Newton de Berlín.

David Lynch: Sin título, Lodz, años 2000 © David Lynch

Nudes es la primera exhibición dedicada al desnudo fotográfico que acoge la Fundación Helmut Newton, una institución que el año próximo cumplirá tres lustros en funcionamiento. La serie de imágenes de Lynch, que no llevan título, fueron tomadas entre la década de los noventa y los primeros diez años de este siglo, en Los Ángeles y la ciudad polaca de Lodz.

Las perspectivas que Lynch capta en ellas, en la mayoría de los casos, ofrecen al visitante fragmentos del cuerpo femenino. Todos ellos evocan ese mundo onírico de las películas de Lynch. En sus fotografías, hay grandes zonas de la imagen desenfocadas. La nitidez, Lynch la sitúa en puntos de la imagen muy concretos. De los cuerpos desnudos que hay en las fotografías seleccionadas por Harder y el propio Lynch para la muestra se puede ver menos de lo que se intuye.

En estas fotografías hay también muchas zonas de oscuridad. Son elementos clave las sombras que construyen nuevas formas en los cuerpos de las modelos fotografiadas. Las imágenes de Lynch no quieren tener que ver con su contenido literal. Son clichés con otras intenciones. En este sentido, Harder conviene en afirmar que estamos ante un Lynch inscrito en la "fotografía moderna", un arte que es, según expresó en su día el fotógrafo dadaísta Raoul Hausmann, "un proceso mental".

"Fotografías oscuras, del lado oscuro del alma"

Entre estas fotografías, que presentan muchas de ellas imágenes abstractas, es la piel visible lo que recuerda que Lynch captura imágenes sirviéndose de modelos humanos. En algunos casos, aquellas superficies de piel que se deja ver en los clichés hacen pensar en la deformidad, otro de los elementos de lo lynchiano.

"Son fotografías oscuras, uno puede hablar ante estas imágenes del lado oscuro del alma, son imágenes que hacen pensar en Mulholland Drive o Inland Empire, en la oscuridad misma de las noches que está presente en esas películas", según Harder.

David Lynch: Sin título, Los Ángeles, años 1990 / Sin título, Lodz, años 2000 © David Lynch

"Esas imágenes tienen un efecto en quien las observa. Estar delante de ellas es una experiencia", reconoce el comisario de la muestra. Esas sensaciones, a través de la fotografía, Lynch las crea acercándose mucho a los cuerpos ante los que presiona el botón del obturador. Su aproximación al desnudo resulta única y muy diferente en cualquier caso de la distancia que toma en sus imágenes Newton -un artista asociado al mundo de la moda- y del tratamiento que daba a sus fotografías Saul Leiter, uno de los exponentes de la conocida como "Escuela Fotográfica de Nueva York".

"Estos tres maestros de la fotografía tienen su propia forma de acercarse al desnudo", sostiene Harder. "Lynch trabaja una fotografía muy pura, en la que se ven únicamente cuerpos y, a veces incluso, no se puede identificar en sus fotografías si estamos ante el cuerpo de un hombre o de una mujer", abunda el comisario de la muestra.

El libro Nudes, origen de la exposición

De hecho, Lynch sólo deja ver el cuerpo entero de la modelo en dos ocasiones. En una de ellas, una de las cinco imágenes en color firmadas por él en la muestra -el resto son en blanco y negro-, se adivina a una mujer a lo lejos. Su rostro no se llega a apreciar. Está desnuda sobre un sofá rojo. Tras ella, una cortina amarilla de gran tamaño sirve de fondo. Lynch tomó la imagen en una suerte de plano aberrante en la que todo está desenfocado, salvo, en primer plano, una nube de humo de cigarrillo.

Pese a compartir muestra con dos grandes de la fotografía, es ostensible la contribución de Lynch a la exposición. Sus 22 fotografías, todas reproducidas en gran formato, ocupan la mayor estancia de la exhibición. La presencia de las imágenes de Lynch no se explica sin la voluntad de Harder de hacer que este artista estadounidense estuviera representado en Nudes.

Fue Harder quien contactó a Lynch para presentarle la idea de participar en la muestra después de que cayera en las manos del comisario de la exposición y director de la Fundación Helmut Newton el libro editado en 2017 por la Fundación Cartier de París que también llevaba por título Nudes. Se trata de un libro de fotografía de Lynch con desnudos hasta entonces inéditos.

En ese volumen, Lynch habla del cuerpo humano, y en especial el de la mujer, como fuente de inspiración. "Me gusta fotografiar mujeres desnudas. Es fascinante la variedad del cuerpo humano: es increíble y mágico ver cómo las mujeres son diferentes", explica Lynch en ese libro.

De esa recopilación de fotografías, aparecida diez años después de la exposición monográfica de David Lynch organizada en París, The Air is on Fire (El aire está ardiendo), salen las 22 imágenes expuestas en Berlín. Reproducidas en exclusiva para la fundación que dirige Harder, constituyen un reclamo inigualable para los amantes del universo lynchiano.

@SmmEnBerlin