Carolina Yuste y Vicky Luengo en 'Chavalas'

Carolina Yuste y Vicky Luengo en 'Chavalas'

Cine

Carol Rodríguez Colas: “En el mundo de la cultura no hay gente de barrio”

La búsqueda de la identidad es el asunto central de 'Chavalas', debut en la dirección de Carol Rodríguez Colás, donde vemos la odisea de una fotógrafa de 27 años que ve cómo su mundo se derrumba

3 septiembre, 2021 08:58

Entre el barrio de su infancia, el obrero Cornellà, y el Born, Marta no solo se debate entre dos lugares muy distintos de Barcelona, también entre dos partes de su identidad que no logra reconciliar. Entre los edificios de pisos abarrotados con ropa tendida en el balcón y los bares sofisticados, la protagonista transita de uno a otro detestando su origen y anhelando un ambiente que conecta con sus aspiraciones profesionales. La búsqueda de la identidad es el asunto central de Chavalas, dirigida por Carol Rodríguez Colás (Barcelona, 1982), donde vemos la odisea de Marta (Vicky Luengo), una fotógrafa de 27 años que ve cómo su mundo se derrumba cuando la despiden de una agencia cool y tiene que volver a Cornellà a vivir con sus padres. Allí se reencuentra con sus amigas de toda la vida, Desi (Carolina Yuste), Soraya (Angela Cervantes) y Bea (Elisabet Casanovas), y comenzará un viaje de reconciliación con sus raíces.

“Dentro de esa búsqueda de la identidad”, cuenta Rodríguez Colás, “hay algo fundamental como es aceptarse a una misma con los defectos y las debilidades. Marta interpreta que venir de un lugar como Cornellà es su debilidad. Cuando por fin se reencuentra con sus amigas y comienza a ser capaz de decirle al mundo quién es, puede reconectar. Yo soy de barrio y he podido comprobar que en el mundo de la cultura hay muy poca gente de barrio, o al menos que lo diga. Y quienes lo son, intentan posturear. He vivido esa sensación de sentirte de repente como un pez fuera del agua. El problema de Marta es que tampoco cuadra en su mundo de origen, sus amigas se ríen de ella. Acaba siendo la choni en un lado y la pija en el otro. En el momento de desclasarse tiene que lidiar con todo eso”.

Chavalas, presentada en el último Festival de Málaga, donde ganó el Premio del Público, no plantea una dicotomía maniqueísta entre esos dos mundos. “En ningún momento queríamos decir que la gente arty es mala y los buenos son los del barrio", asegura la directora. "Su amiga fotógrafa piensa que son amigas realmente y quiere ayudarla. Marta sabe perfectamente que si quiere llegar hasta donde quiere llegar también tiene que moverse en ese mundo”. En su caso, esa búsqueda de la identidad se confunde con la de su voz artística. “Ese es un viaje que también hemos hecho nosotras, nos inspira mucho el barrio. Me fascina su arquitectura tan gris y la gente que viene del pueblo y sigue haciendo vida en la calle. No es el lugar más bonito del mundo, pero yo veo belleza y autenticidad. Siempre he trabajado tratando de dignificar el barrio”.

Cuando habla en plural, Carol se refiere a su hermana, Marina, escritora del guión. “Las dos hemos hecho ese viaje de autoaceptación que implica sacar muchas vergüenzas tuyas y afrontar tus debilidades. Vemos, por ejemplo, esas microviolencias que ejerce Marta sobre sus padres trabajadores, olvidando el esfuerzo que han hecho para pagarle unos estudios que le han permitido hacer lo que hace. Era muy arriesgado plantear una película con un personaje como ella que tantas veces resulta muy antipático, se trata de que el espectador haga el viaje con una persona muy inmadura”. Sus antiguas amigas, a las que mira con semblante desdeñoso, acabarán siendo su refugio. “Lo maravilloso de la adolescencia es que te haces amiga de personas que después cuando eres adulto ya no te harías", explica Rodríguez Colas.

La relación de la joven y ambiciosa fotógrafa con esas “chavalas” acapara buena parte de las secuencias. “Cuando una mujer hace una película con cuatro mujeres protagonistas se supone que es para un publico femenino, pero nadie piensa que una película dirigida por un hombre con cuatro intérpretes masculinos sea solo para ellos. Hay pocas películas protagonizadas por mujeres porque sigue habiendo pocas directoras, pocas productoras…”, asegura la cineasta. “Las mujeres somos seres humanos normales y corrientes, hablamos de sexo, decimos tonterías y de vez en cuando también tenemos conversaciones profundas. Se suele considerar que hay una jerarquía por la cual las relaciones sentimentales son más importantes que la amistad cuando no es así. Para mí mis amigos siempre han sido muy importantes y quería poner eso en valor”.

@juansarda