A Enric Auquer dan ganas de darle un achuchón. Incluso en Quien a hierro mata (2019), de Paco Plaza, en la que interpreta a un macarra violento sin sesera desprende una inevitable ternura, una palpitante fragilidad.



Por esa película ganó el Goya al Mejor Actor Revelación que recogió con lágrimas en los ojos. Podría ganar el segundo, ya como actor protagonista, por El maestro que prometió el mar, dirigida por Patricia Font, que se ha convertido en un insospechado éxito de taquilla

En la película, ambientada en los albores de la guerra civil, vemos la historia real del maestro de escuela Antoni Benaiges, un catalán de Tarragona que dio clases un año en Bañuelos de Bureba, en Burgos, antes de ser ejecutado por los fascistas al principio de la guerra. De ideas izquierdistas, fue un profesor heroico e innovador que aplicó en España las teorías del pedagogo francés Célestin Freinet. 

Usando una imprenta, Benaiges confeccionaba con los alumnos unos cuadernos en los que los pequeños alumnos escribían sus reflexiones sobre la vida. Según decía, su intención no era educar a los niños para que sean “buenos adultos” sino, precisamente, “buenos niños”. 

Auquer, de 35 años y de un pequeño pueblo de Girona, Rupià, desborda entusiasmo en su interpretación de un maestro idealista y soñador que desde el principio tiene que enfrentarse con el cura del pueblo y el alcalde, que le reprochan que quite el crucifijo de la escuela, sus métodos “demasiado modernos” y un artículo que publicó en la prensa local criticando la injusticia social.



En una historia que ya de por sí invita a las lágrimas, el actor transmite verdadera humanidad y da luz a un personaje que acaba siendo trágico. 

Hijo de madre bailarina y padre arquitecto, Auquer ha copado también titulares en las últimas semanas porque las revistas del corazón han publicado unas fotos con su pareja, Macarena García, más de moda que nunca gracias a La mesías, con lo cual en este caso a su buen momento profesional se une un buen momento personal aunque él no ha dicho nada al respecto.

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Si van juntos a los Goya (que presenta el hermano de García, Javier Ambrossi), será una de las fotos de la noche. El actor tiene ya dos hijos, una niña con la también actriz Marta Aguilar y un niño con la cantante Adela Oller.

Auquer creció en una familia donde se respiraba amor por la cultura. No tuvo una infancia y adolescencia fáciles ya que según él mismo ha contado varias veces  "De pequeño estaba diagnosticado de TDAH, era disléxico, tenía ansiedad, hiperactividad, era un desastre escolar, no podía estar quieto", confesó a El Periódico de Extremadura en 2019. Por lo visto, llevaba un cojín para echarse a dormir en las clases y aun tiene pesadillas con que tiene que ir al colegio.

La actuación fue una tabla de salvación insospechada. En 2008, cuando ya contaba con 20 años y se sentía perdido, encontró por fin su vocación. Según ha explicado él mismo: "Yo estaba viviendo en Londres y estaba muy perdido. Mucho de fiesta y esas cosas, ya sabes. Y mi mamá me dijo: ‘Vuélvete y apúntate a hacer las pruebas del Instituto del Teatro’. Volví de Londres, hice las pruebas, pasé la teórica y empecé a hacer el práctico y el último día no me presenté a las pruebas. Me daba mucho palo que una peña aleatoria me dijera si servía o no servía para esto. Pero me apunté a El Collegi del teatre, una escuela muy enfocada al teatro en la que nos hacían técnica de voz, de vocalización de escena, historia y teoría teatral".



Y acertó porque también según él mismo: “Fue la primera vez que sentí que se me daba bien algo. Me sanó muchísimo”.

Hasta llegar a su estrellato con Quien a hierro mata, Auquer fue labrando poco a poco su carrera en Cataluña en la escena teatral trabajando para la Fura dels Baus o directores como Oriol Brogi, además de tener apariciones en series y TV movies de TV3 como Cites o Com si fos ahir.



2019 fue su año ya que, además de la película de Paco Plaza, interpretó a Gary, un discapacitado mental, en Vida perfecta, la exitosa serie de Leticia Dolera premiada en Cannes.

En los últimos tiempos lo hemos visto en títulos como la serie de Netflix Sky rojo, en la que vuelve al personaje de macarra interpretando un proxeneta; la comedia La vida padre (2022), donde da vida a un chef que tiene que lidiar con un padre que ha perdido la cabeza (Karra Elejalde) y otra comedia como la reciente Me he vuelto viral, junto a Blanca Suárez.



Muy solicitado, tiene pendiente de estreno cuatro películas como Mamífera, un drama sobre la paternidad de Liliana Torres o Casa en flames, de Dani de la Orden, en la que coincidió con Macarena García.