Image: José Antonio: La danza española es revolucionaria

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José Antonio: "La danza española es revolucionaria"

El director del Ballet Nacional de España estrena en el Teatro Madrid un programa de Escuela Bolera que celebra los 30 años de la compañía

4 marzo, 2009 01:00

José Antonio, director del Ballet Nacional de España, durante la presentación de Escuela bolera en el Teatro Madrid. Foto: EFE

MARTA CABALLERO
Se oye de fondo el altavoz que exige su presencia en el escenario para las pruebas previas al estreno. El Ballet Nacional de España está de cumpleaños y, con los 30, "como un ser humano" -opina quien es reclamado por las ondas sonoras-, está abrazando una sana madurez, tras haber recorrido un camino "lo suficientemente amplio". El reclamado es también su director, y un poco padre de la criatura: estuvo en los comienzos, celebró bailando con Gades su primera década y reincidió cuando se trataba de celebrar los 20 años. Como progenitor orgulloso pero atento, celebrará la efeméride a partir de esta noche en el Teatro Madrid, una ocasión para la que ha preparado un programa de Escuela Bolera del siglo XVIII, una de las facetas más trabajadas por la compañía.

PREGUNTA.- Valore los 30 años del Ballet Nacional de España
RESPUESTA.- Creo que la evolución de la compañía a lo largo de estas tres décadas ha sido muy buena. Lógicamente en todas las etapas de la vida hay momentos más álgidos y otros menos luminosoS, pero puedo decir que el saldo es positivo y estar orgulloso de todos cuantos han colaborado con la compañía, desde escenógrafos a maestros, coreógrafos, bailarines... todos han sido geniales.

P.- Después de tantos años ligado a la compañía, casi sentirá el cumpleaños como el suyo propio.
R.- Lo es, porque estuve en los comienzos, en los anteriores aniversarios y estoy ahora de forma plena. He visto crecer al grupo en una sociedad cambiante, y apreciado y participado en su evolución en todos los niveles. El ballet ha cambiado en la estética, en lo formal y también en la épica. Son ya dos generaciones de bailarines pujando por su futuro y por la danza de este país, y es hermoso ver cómo luchan por ello.

P.- Ha hablado del pasado. Pero, mirando hacia delante, ¿A qué aspiran?
R.- Lo importante para la compañía es mirar atrás sólo para conocer las raíces y referencias, pero aquí siempre trabajamos de forma rigurosa mirando hacia el futuro, para recoger frutos a corto o largo plazo. Aspiramos a seguir trabajando con esta rigurosidad, a seguir creando proyectos de calidad. A veces, de la casualidad puede salir algo bueno, claro, pero no podemos basarnos en eso. La constante debe ser la rigurosidad.

P.- ¿Qué se va a encontrar el público con este nuevo montaje?
R.- Lo más novedoso será asistir a un recorrido de coreografías de hace muchos años entrelazadas con otras más recientes y, sobre todo, ver las tradicionales como las de Antonio Ruiz Soler, ángel Pericet, Mariemma y Victoria Eugenia, con las nuevas que he preparado yo, interpretadas por bailarines jóvenes que se enfrentan a este repertorio por primera vez. Es novedoso, rico y creo que el público sabrá agradecer esta nueva frescura.

P.- La interpretación corre a cargo de bailarines jóvenes, ¿cree que habrá gente de su generación entre el público?
R.- Esto es como lo de Mahoma y la montaña... cada uno tiene que hacer las cosas como cree que deben hacerse e indudablemente intentar inspirar a otras personas, sobre todo a los jóvenes. Si sirve como estímulo a unos cuantos, me doy por satisfecho.

P.- ¿Presenta para este espectáculo algunas obras propias, cómo las ha construido, qué le inspiró?
R.- Hay dos ya estrenadas, una en el 88 y Amanecer en el XVIII, que estrené para el taller de estudio del Ballet Nacional de España, y ahora he creado dos como tributo a Albéniz (Córdoba y Rumores de la Caleta) que he preparado con los guitarristas de la compañía. Son dos miniaturas para dos obras históricas y que he querido recuperar con la intención de ampliar el abanico, para que no haya únicamente zapatilla.

P.- ¿Es posible reunir danza española y vanguardia? ¿qué tiene de revolucionaria la danza española?
R.- De revolucionaria tiene absolutamente todo. No hay nada más revolucionario que algo que surge de la expresión de un pueblo que reivindica una forma de ser y de vivir. Es una filosofía de vida. Por desgracia, en este país no somos conscientes del gran patrimonio que atesoramos y del deber que tenemos con él. Y la evolución y la vanguardia existirá dentro de esta danza mientras exista un artista con talento que ame su cultura. Creo que se puede estar muy ligado a la tradición y ser revolucionario. Otra cosa es el fuego de artificio, que también abunda, pero del que luego no queda ni el olor a pólvora.

P.- ¿Y de qué hay más, de artistas con talento o de fuegos artificiales?
R.- De lo primero, hay muchos bailarines estupendos con estas características. Pero debemos estar atentos, porque si bien es cierto las cosas antes eran muy complicadas, también es lo es que hace unos años las identidades de los artistas estaban más acentuadas. La sociedad globalizada ha unificado tanto todo que también ha unificado las identidades culturales, y esto es muy dañino para la danza española, inspirada de raíz en las identidades. No soy apocalíptico, pero hay que estar en guardia.