Muere el icono del country Glen Campbell

Glen Campbell

El cantante Glen Campbell, leyenda de la música country, ha muerto a la edad de 81 años tras una ardua batalla contra el alzhéimer, según informó su familia en un comunicado donde se le reconocía como "querido esposo, padre, abuelo y legendario cantante y guitarrista".

Nacido en abril de 1936 en un pequeño pueblo de Arkansas, la voz de Campbell se popularizó a partir de la década de los 60, con éxitos como Wichita Lineman o Gentle on my Mind y By The Tiem I Get To Phoenix, por los que obtuvo dos premios Grammy de manera simultánea. Una situación que se consolidó tiempo después, cuando ya en los años 70 algunos de sus hits como Southern Lights o Sunflowe cosecharon grandes ventas. En particular su canción Rhinestone Cowboy, que llegó a convertirse en el sencillo más vendido del momento, con más de dos millones de copias vendidas en los primeros meses.

Definido como "una de las más grandes voces de todos los tiempos", en palabras de otra leyenda del country como Dolly Parton, que le quiso rendir su particular homenaje a través de sus redes sociales, Campbell intervino junto a John Wayne en 1969 en el wéstern dirigido por Henry Hathaway, True Grit, Valor de ley en castellano. Película para la que además interpretaría el tema central, con título homónimo, por el que sería nominado a uno de los premios de la Academia.

De 1969 a 1972, el cantante condujo su propio programa de televisión, The Glen Campbell Goodtime Hour, donde participaban como invitados otros músicos del country. Mientras que a partir de los años 80, atravesó su peor etapa, debido a sus problemas con las drogas y el alcohol.

Como guitarrista, actuó junto a Frank Sinatra, Elvis Presley o Ricky Nelson. Faceta que Lenny Kravitz quiso recordar en su cuenta de Instagram al conocer la noticia de su muerte: "A pesar de ser un artista solista, Glen Campbell también fue un genio como músico tocando en grabaciones de The Beach Boys hasta Frank Sinatra -escribió-. Él era puro talento, corazón y coraje".

En 2011, anunció que padecía alzhéimer, una enfermedad contra la que luchó de manera pública y a la que intentó dar visibilidad a partir del documental dirigido por James Keach, Glen Campbell: I'll Be Me.

Miembro del Salón de la Fama del Country, con más de 45 millones de discos vendidos a lo largo de su carrera, en junio de este mismo año lanzó un último álbum, un recopilatorio de versiones de canciones de Willie Nelson, Bob Dylan o Fred Neil, titulado premonitoriamente Adiós.