El escritor japonés Haruki Murakami gana el Premio Princesa de Asturias de las Letras

Haruki Murakami, el escritor japonés contemporáneo más leído y traducido en todo el mundo, ha sido elegido hoy como ganador del Premio Princesa de Asturias de las Letras, un premio al que optaban 37 candidatos de 17 nacionalidades.

El jurado ha destacado "la singularidad de su literatura, su alcance universal, su capacidad para conciliar la tradición japonesa y el legado de la cultura occidental en una narrativa ambiciosa e innovadora que ha sabido expresar algunos de los temas y conflictos de nuestro tiempo: la soledad, la incertidumbre existencial, la deshumanización de las grandes ciudades, el terrorismo, pero también el cuidado del cuerpo o la propia reflexión sobre el quehacer creativo".

"Su voz, expresada en diferentes géneros, ha llegado a generaciones muy distintas. Haruki Murakami es un gran corredor de fondo de la literatura contemporánea", concluye el acta del jurado.

Este galardón es uno de los reconocimientos internacionales más importantes en la carrera de Murakami, que es candidato al Nobel de Literatura desde hace años. En 2018, el autor nipón pidió que se retirase su candidatura al 'Nobel alternativo' que figuras destacadas de la cultura sueca organizaron aquel año después de que el oficial se suspendiera debido a un sonado escándalo de acoso sexual en la Academia Sueca. En 2016 Murakami recibió el premio Hans Christian Andersen de Dinamarca. También ha sido distinguido con el Franz Kafka de la República Checa, el Premio Jerusalén, el Premio Mundial de Fantasía, en Estados Unidos, y el premio de relatos cortos Frank O'Connor de Irlanda.

El Princesa de Asturias de las Letras no es el primer galardón que recibe en España. En 2009 fue distinguido con la Orden de las Artes y las Letras del Gobierno español y en 2011 recibió el XXIII Premio Internacional de Cataluña.

Dentro de su país su lista de reconocimientos empezó desde el mismo momento en que empezó a publicar libros. Con el primero de ellos, Escucha la canción del viento (1979), obtuvo el premio Gunzou para escritores noveles. También obtuvo unos años más tarde el Premio Noma, el Kuwabara Takeo, el Yomiuri y el Asahi.

Murakami, uno de los autores extranjeros más importantes de la editorial española Tusquets y traducido a más de cuarenta idiomas, es un auténtico fenómeno de masas en su país. Su novela 1Q84 vendió un millón de copias en Japón en solo 12 días, y su obra más reciente, La ciudad y sus muros inciertos (que salió a la venta allí el mes pasado y en España se publicará en la primavera de 2024) congregó multitudes de lectores a las puertas de las librerías para poder hacerse lo antes posible con un ejemplar.

El jurado que ha otorgado el premio al autor japonés, que comenzó sus deliberaciones ayer en el Hotel Reconquista de Oviedo, ha estado presidido por Santiago Muñoz Machado, director de la RAE; y ha estado compuesto por escritores, libreros, editores y otras personalidades del mundo de la literatura como Juan Mayorga (ganador del año pasado), Leonardo Padura (ganador de 2015), Juan Villoro, Blanca Berasátegui, Sergio Vila-Sanjuán, Anna Caballé, Gonzalo Celorio, José María Pou, Jaime Siles y Fernando Rodríguez Lafuente, entre otros.

Además de Mayorga, en las últimas ediciones han sido galardonados autores como Emmanuel Carrère, Anne Carson, Siri Hustvedt, Fred Vargas, Adam ZAgajewski, Richard Ford, John Banville, Antonio Muñoz Molina, Philip Roth, Leonard Cohen, Amin Maalouf, Ismaíl Kadaré, Margaret Atwood, Amos Oz, Paul Auster, Nélida Piñon y Claudio Magris.

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Nacido en Kioto en 1949, Murakami es hijo de un sacerdote budista y una comerciante, que ejercían como profesores de literatura japonesa. Creció con una importante influencia de la cultura occidental, especialmente de su literatura y su música. En la Universidad de Waseda estudió literatura y teatro griegos, y allí conoció a su esposa, Yoko.

Murakami es autor de novelas con un tono intimista y una atmósfera enigmática, y una conjunción de elementos realistas y fantásticos que las acerca al realismo mágico, y en las que inserta numerosas referencias a la cultura popular. Es el caso de Norwegian Wood (1987), cuyo título original (en España se tradujo como Tokio Blues) está tomado de una canción de los Beatles. Narra la historia de un estudiante universitario llamado Toru Watanabe y su relación con dos mujeres, Naoko y Midori, en el Japón de la década de 1960. Aquel libro supuso su consagración internacional, un éxito que le llevó a dejar Japón para vivir en Estados Unidos —donde fue profesore de las universidades de Princeton y Taft— y Europa durante unos años, hasta que en 1995 regresó a su país.

Entre sus novelas más conocidas figuran también Crónica del pájaro que da cuerda al mundo (1994), que combina elementos realistas y fantásticos y cuyo narrador busca a su hermana desaparecida, y Sputnik, mi amor, que cuenta la historia de Sumire, una escritora joven que se enamora de una mujer mayor y experimenta una serie de acontecimientos misteriosos. Kafka en la orilla (2002), por su parte, entrelaza dos historias paralelas: la de un chico de 15 años llamado como el escritor checo que huye de casa y la de un hombre mayor apasionado de los gatos. La referencia a Kafka aparece también en el relato “Samsa enamorado”, incluido en la edición española de la colección de historias cortas Hombres sin mujeres.

En 2011 se publicó en España 1Q84, una extensa novela en tres partes que mezcla ciencia ficción y realismo mágico, y cuyo título alude a 1984, la novela distópica más conocida de George Orwell. No obstante, según el crítico Nadal Suau, esta obra, a pesar de su ambición, no está a la altura de otros títulos de Murakami, aunque contiene muchos de los temas habituales de su literatura.

Entre sus obras publicadas también figuran la llamada Trilogía de la rata (compuesta por Escucha la canción del viento, Pinball 1973 y La caza del carnero salvaje), El fin del mundo y un despiadado país de las maravillas, Baila, baila, baila, Al sur de la frontera, al oeste del sol, After Dark, Los años de peregrinación del chico sin color y La muerte del comendador (en dos volúmenes), así como las colecciones de relatos El elefante desaparece, Después del terremoto y Sauce ciego, mujer dormida. 

Su último libro publicado en España es Primera persona del singular (2021), un conjunto de relatos que, según el crítico de El Cultural Rafael Narbona, “son Murakami en estado puro, con todas sus virtudes: prosa directa y pegadiza como una melodía de los Beatles, atmósferas oníricas y deslumbrantes, personajes abrumados por la soledad y los problemas de identidad, ciudades con bares acogedores y con grandes avenidas impersonales donde cae una lluvia insidiosa”. En definitiva, unos relatos que “no defraudan a sus devotos, pero tampoco se arriesgan a explorar algo nuevo”.

Murakami es un apasionado de la música, tanto la clásica, como el jazz y el pop, y de hecho regentó cuando era joven un club de jazz. Además de llenar sus novelas de referencias musicales, el escritor ha volcado su melomanía en algunos libros de no ficción, como Retrato en jazz (en dos volúmenes) y el reciente Música, solo música, escrito a partir de las conversaciones mantenidas con su amigo Seiji Ozawa acerca de Brahms, Beethoven, Bartók, Mahler, Leonard Bernstein o Glenn Gould.

Tras el ataque terrorista con gas sarín del metro de Tokio en 1995 —perpetrado por la secta Aum Shinrikyo y en el que murieron 13 personas y otras 50 fueron gravemente heridas—, Murakami regresó a vivir a su país y escribió Underground, un libro de corte periodístico en el que el escritor entrevistó a numerosos supervivientes del ataque y criticó a los medios de su país por el enfoque sensacionalista que puso el foco en los atacantes, ignorando a las víctimas. En 1998 publicó una segunda parte, El lugar prometido, en la que se centró en la secta que ideó y llevó a cabo los ataques.

También ha publicado en los últimos años los ensayos De qué hablo cuando hablo de correr (otra de las aficiones que ha compartido con sus cientos de miles de lectores) y De qué hablo cuando hablo de escribir.

Además de escritor, Murakami también ejerce de traductor. Ha trasvasado al japonés la obra de Raymond Carver, Francis Scott Fitzgerald, Truman Capote, J. D. Salinger y John Irving.

Este ha sido el quinto de los ocho Premios Princesa de Asturias que se conceden
este año. Anteriormente, fueron otorgados el Premio Princesa de Asturias de las Artes a la actriz estadounidense Meryl Streep, el de Comunicación y Humanidades al profesor, escritor y filósofo italiano Nuccio Ordine, el de Ciencias Sociales a la historiadora francesa Hélène Carrère d'Encausse y el de los Deportes al atleta keniano Eliud Kipchoge. En las próximas semanas se fallarán los correspondientes a Cooperación Internacional, Investigación Científica y Técnica y Concordia.

El acto de entrega de los premios se celebrará, como es tradicional, en el mes de octubre, en una ceremonia que presidirán los reyes, acompañados por la princesa Leonor y la infanta Sofía.