Acantilado, 2013. 120 páginas. 15 euros



¿Qué se siente al escuchar? ¿Qué dispositivos ocultos activa el Gran Arte? ¿Por qué Wagner? ¿Por qué? Puede ser porque, como afirmó W.H. Auden, el compositor fuera "el mayor genio que haya existido nunca". O tal vez la razón estribe en que, como escribe en esta inusual biografía Bryan Magee (Londres, 1930), Wagner es "un gran artista que teoriza sobre su arte en un ensayo tras otro y que luego pone en práctica sus teorías creando obras maestras".



Seis décadas pasan de la publicación, ahora revisada y actualizada, de este pequeño clásico en el que se amalgaman en un cóctel agitado pero no mezclado la teoría de la ópera, los judíos, el culto a Wagner, su influencia, su interpretación y, en sobrevuelo picado, su arte au complet. Magee no sólo ofrece las claves biográficas esenciales del maestro sino algo más peliagudo: una explicación racional y razonable de la turbulencia emocional que nos provoca su música. Una historia oculta que saca a la luz tan inusuales episodios como el de la asociación wagneriana de Marsella, entre cuyos miembros se contaba Zola. Toda una grata sorpresa en definitiva este libro que, pese a su aparente delicadeza, resulta mucho más que torrencial. miguel cano