Estas semanas están siendo moviditas en cuanto a novedades tecnológicas se refiere. Hace nada Apple presentó sus nuevos productos de la serie «Mac», i su respectivo iOS6 para terminales móviles; dentro de nada tenemos el Google I/O, donde se esperan también un buen puñado de novedades respecto a Android, entre otras cosas. Pero esta semana le ha tocado el turno a Microsoft, quien ha presentado, sin hacer mucho ruido como quien dice, el nuevo WP8 (podéis ver todos los detalles en los artículos que han realizado nuestros compañeros de Omicrono, aquí o aquí), y al estar en la misma «liga» que Android, vamos a comentar un poco si puede o no ser un rival a tener en cuenta, ya que WP7 creo, a nivel personal, que no lo ha sido.
Novedades, cambios y empezar de cero. ¿Suficiente?
Básicamente con esto se podría resumir lo que será WP8: traerá novedades y cambios, obviamente, pero lo más destacable es que parece ser que será algo así como un «cambio radical». Tal vez no a nivel visual o exterior, pero si en cuanto a su «interior».
Y esto tendrá sus consecuencias: no podrá ser instalado en cualquier terminal actual con WP7. Este puede ser el primer punto negativo, y que puede llevarle a Microsoft algunos «problemas»; para empezar, recordemos que WP7 tampoco lleva tanto tiempo en el mercado y por tanto, los terminales tampoco. Eso por una parte, y por otra, este hecho puede hacer que haya ciertas personas que critiquen esta acción pues en su día Microsoft ya se encargó de «alabar» las bondades de la fragmentación en Android. Cierto es que según ellos esto lo hacen para, a partir de ahora, evitar esa fragmentación, pero por el momento empiezan con ella y habrá que ver si se mantiene.
Y dejando de lado este «pequeño» detalle, ¿serán suficientes los cambios? Pues bueno, para empezar diré que ahora Microsoft está un poco más cerca de competir con Android o iOS, aunque no por sus novedades.
A falta de probar de primera mano como funciona, podemos decir que se han esforzado en ponerse a la altura, y ciertos aspectos juegan muy a su favor. El hecho de que todas las «tripas» sean las mismas que W8 y W8RT, es una gran ventaja, ya que los desarrolladores podrán portar casi sin esfuerzo aplicaciones y juegos (estos con ciertos matices) de una plataforma a otra; pero creo que esta es la única novedad importante.
Muchas de las otras, como hemos dicho, aún siendo interesantes para el sistema, no son «nada nuevo». La interfaz sigue siendo la denominada «Metro», con algunos retoques: ahora podemos redimensionar los iconos o accesos en 3 tamaños distintos para reorganizar nuestro «escritorio» como mejor nos convenga y han añadido más colores, lo que me recuerda ligeramente a los widgets que ya tenemos en Android. Nada nuevo.
Han mejorado el navegador asegurando que es más rápido que los SGS3 o iPhone4S, aunque conociendo a Microsoft, prefiero esperar a comprobarlo «in situ» (sin vídeos montados) para ver si es verdad. Y menos mal que han aumentado las resoluciones de pantalla, llegando ahora hasta 720p.
¿Que más? Ahora en lugar de usar los mapas de Bing, han decidido pasar a los de Nokia, que todo sea dicho, malos no son. Los usé una temporada en mi antiguo 5800 y no están nada mal. Al igual que Apple, no quieren quedarse atrás en la navegación asistida, y perece que todos quieren tener su propio sistema GPS. Y por suerte, ya añaden soporte para tarjetas MicroSD, algo que no entiendo como han tardado tanto en incorporar, si los Nokia de hace años ya la llevaban. Un punto a favor, sí, pero llega tal vez un pelin tarde.
También añaden el chip NFC, ese del que tanto se habló en su momento que no tendría futuro. Pues bien, aquí han hecho algo distinto creando un sistema de pago propio, al estilo Google Wallet o Passbook de Apple. Esto me parece interesante no por el hecho de que sea una mejora, sino porque puede que poco a poco este chip empiece a coger fuerza, ya que es muy interesante como os explicamos en este post hace unos días. Pero de nuevo no tiene nada.
Mayor integración con Skype, mejor rendimiento, ah!, y soporte para procesadores de más de 1 núcleo. Todo un avance.
Analizando en términos generales si este nuevo WP8 puede ser un rival a tener en cuenta para Android, personalmente diría que…aún no. Me parece estupendo que añadan todas estas novedades, y la verdad son muy importantes para no quedarse atrás, pero no aportan nada nuevo; a los usuarios de WP les vendrán de perlas, seguro, pero creo que no son suficientes.
WP8 está un poco más cerca pero no por méritos propios. Ha añadido algo que ya existe en los demás OS, simplemente eso. Y así no es como se gana; se necesita algo más. Algo que te haga destacar sobre el resto, y de eso ahora hay 2 compañías que de momento lo saben hacer muy bien.
¿Os parece que estas novedades pueden hacer que Microsoft se acerque a los puestos de cabeza de esta batalla de OS? ¿Suficientes? ¿Nuevas? ¿Más de lo mismo?
PD: Y esto ya es opinión personal pura y dura con algo de offtopic: Steve Ballmer me parece el peor individuo para promocionar cualquier producto, siempre y cuando quieras que ese producto sea tomado en serio.