Tras ver el polémico artículo de mi compañero Nico La vida de un androide libre con un iPhone 5 y los revuelos que ha levantado, he querido yo también expresar mi opinión como editor de El Androide Libre. Me parece completamente respetable la opinión de Nico, pero que queréis que os diga: yo no podría utilizar un iPhone en mi vida.
Nota del editor:
Antes de nada, os recuerdo que estos artículos son de Opinión a título personal. Podéis estar de acuerdo o no con un redactor, pero realmente el argumento “No me ha gustado este artículo, ya no vuelvo a entrar a El Androide Libre” me parece muy infantil. Sobre todo teniendo en cuenta que estamos publicando una media de 35-40 artículos semanales (la esencia del blog es la pluralidad de muchos redactores) con el esfuerzo de mucha gente para que se desprecie su esfuerzo. Generalizar nunca es bueno, pero cada uno es libre de decir y hacer lo que quiera.En cualquier caso, desde El Androide Libre pedimos disculpas si alguien se ha sentido ofendido por el contenido del artículo. En ningún momento Nicolás ha querido presumir de móviles/dinero ni ha querido vendernos el iPhone. Ha sido un artículo de opinión personal en el que relataba su transición y en su momento nos ha parecido interesante ver diferentes puntos de vista. Debido a una desafortunada serie de frases, ha dado esa impresión. Repetimos, disculpad si os habéis sentido ofendidos y intentaremos que no ocurra de nuevo.
Dicho esto, volvamos al meollo.
Malos argumentos
Como iba diciendo, ninguno de los argumentos de Nico me parecen de peso. Por las siguientes razones.
“Otra razón es la cámara, que en el iPhone 5 es una maravilla”
Realmente y como bien decía un usuario, si quieres una cámara buena, cómprate una cámara y no un móvil. Y no me digáis que las cámaras del Samsung Galaxy S3, HTC One X o Xperia S no están a la altura del iPhone. Eso es una soberana tontería. Estamos hablando que cada uno de estos teléfonos tiene sensores de 8-12 Mpx, resoluciones de 3264×2448 que graba vídeo a 1080p@30 fps. “No es que yo me paso al iPhone por que su cámara es mejor”. Pues muy bien.
“El iPhone 5 tiene un acabado magnífico, que da la sensación de ser un móvil de calidad desde el principio”
Precisamente, la grandiosidad de Android es que podemos escoger entre cientos de teléfonos. El Nexus 4, que luce de infarto, el Samsung Galaxy S3, el HTC One X, los últimos Xperia, o el último bellezón de Huawei. Que alguien coja estos teléfonos y me diga que no dan sensación de calidad.
“El iPhone tiene la fluidez que ningún Android tiene”
Normal, si comparas un teléfono recién nuevo (un par de semanas) a un Android que llevas durante tiempo. Espérate a llenar el iPhone de aplicaciones. Va horrible, y lo digo por experiencia que he probado muchos móviles. Además, siento decir que un SGS3, un HTC One X o incluso un Galaxy Nexus con Android 4.1.2 Jelly Bean va como un auténtico rayo. Una fluidez alucinante. Que me digas que la interfaz va un poco lenta, eso es culpa de Samsung, pero tan sencillo como instalar un Launcher como ADW Launcher Ex o Nova Launcher.
Y ahora no me vengáis los típicos usuarios que dicen “Pues mi Galaxy Ace va muy lento comparado con un iPhone”, por que no estamos comparando equipos de la misma potencia. Ojo, que gente así la hay a porrones.
Lo que hubiesen sido buenos argumentos
Y es que puedo imaginarme unos cuantos argumentos por los que escoger iPhone por encima de iOS. Son argumentos sencillos a los que nadie podría haberles llevado la contraria.
- Mejor servicio de post-venta y atención al cliente. Es innegable, el SAT de Apple es de lo mejor que hay. Si me compro un teléfono y quiero tener la certeza de que habrá alguien allí detrás para resolver mis dudas o arreglar el teléfono si se rompe, entonces escoge un iPhone
- Mejores accesorios. También es cierto. Si eres fan de los accesorios, ya sean carcasas, extras, adaptadores, filtros y todo lo demás, nada como tener un iPhone.
- Las cosas sencillas. Si no te quieres preocupar nunca de en qué versión tienes el teléfono o si es compatible con una aplicación u otra, cómprate un iPhone.
Lo que tiene Android que nunca tendrá iPhone
Sincronización
Mi compañero Nico hablaba de que había solventado el problema de sincronización conectando su iPhone a una cuenta Exchange y no se que otras peripecias. Tonterías, eso no es sincronización. Cuando hablo de sincronización en mi Android, hablo de sincronización total.
El poder de Android reside en que coja cualquier Android, introduzca mi cuenta de gmail, y que al momento tenga en este dispositivo mis correos, mis contactos, mis calendarios, mis conversaciones de gtalk, mis archivos Google Drive, mi Música, mis marcadores Chrome y todas las aplicaciones que tenía instaladas. Y que si hago un pequeño cambio, al mismo instante me aparezcan en todos mis dispositivos Android.
Eso es la verdadera sincronización, no tener que poner cuentas exchange que solventen el problema, el saber que coja el dispositivo Android que coja (mi móvil, mi tablet, el móvil de mi padre o el de un amigo), no voy a necesitar nada más y se que voy a tener los últimos correos e información a mano.
Las notificaciones
Las notificaciones en iPhone son un puñetero INFIERNO. Horribles. No sabes cuántas tienes, ni cuándo han llegado, no puedes interactuar con ellas… no le llegan ni a la suela del zapato a las notificaciones de Jelly Bean. Ni me voy a molestar en comentarlo mucho más.
Todo lo demás
Y es que la grandiosidad de Android va mucho más allá. Todos los pequeños detalles de los que estamos tan bien acostumbrados que ni nos damos cuenta. Poder usar NFC + Tasker para realizar cientos de funciones, tener un widget de reloj, uno del tiempo, uno con tus noticias… Tener incluso un sencillo widget con el nivel de tu batería para poder estudiarla en profundidad. Tener acceso a las modificaciones más profundas de tu sistema. Poder abrir un archivo con la aplicación que yo quiera y no solo con las que Apple me deja. Poder conectar mi teléfono al PC y navegar por la SD directamente sin necesidad de programas extraños y del coñazo de iTunes. Poder cambiar las fuentes si me apetece o instalar una aplicación que no haya pasado la censura de Apple. Poder cambiarle la ROM si quiero, poder cambiar la densidad de pantalla o realizar copias de seguridad.
En fin, que me podría estar horas y horas explicando a la gente por qué Android le da mil y una vueltas a iOS, y por qué podemos encontrar teléfonos Android infinitamente superiores al iPhone. Pero bueno, supongo que a vosotros no os he de convencer, si no a mi compañero Nico que debe estar así en estos momentos.
Y ¡Viva Android!, que lo hemos de decir más veces…