Cuando apenas estamos recibiendo los primeros detalles del Samsung Galaxy S4 y mientras nos terminamos de librar de la resaca del MWC es un buen momento para aprovechar y hacer una pequeña reflexión. Los primeros datos del S4 revelan un procesador de 8 nucleos balanceados 4+4 en función del uso, hay rumores de desplazamiento ocular, no está lejos el día en que nos encontremos un dispositivo que aproveche las virtudes de los nuevos materiales como el grafeno (si pones esta palabra en cualquier noticia automáticamente se vuelve Trending Topic).

No obstante, mientras tanto, quizá convenga echar un pequeño vistazo atrás y mirar qué provocó el éxito de otros aparatos antes que estos, para ver si quizá inspirándonos en ellos podemos conseguir un producto mejor y que de verdad marque la diferencia con respecto a la competencia.

Mayor resistencia

Si, algo tan simple como esto. Un antiguo Alcatel mío sobrevivió a tres pisos de caida libre con un simple arañazo en su carcasa de plástico y a un baño en agua (o algún refresco, por entonces no tomaba cañas…) sin mayores consecuencias de cara a su funcionamiento. Sin embargo ahora, al ser principalmente pantalla, nuestros smartphone son susceptibles de reventar al golpearse. No obstante, parece que muchos fabricantes empiezan a darse cuenta de esto y preparan sus pantallas de forma que sean flexibles, con lo que en caso de un impacto (no de tres pisos, hombre, pero al menos las caidas más habituales que puede sufrir el terminal) la pantalla no debería sufrir, o al menos no tanto como si fuera cristal y, por tanto, no reventar.

Con respecto al agua si parece que están prestando más atención. Nuestros teléfonos se han convertido en elementos con una componente social mucho más activa, la clave no es sólo usarlos como herramientas básicas de comunicación, sino avanzadas, con lo que tendemos a llevarlos con nosotros cuando vamos a cenar o a tomar algo y, demasiado a menudo, los dejamos con nosotros sobre la barra o mesa, con lo que nos arriesgamos a que un camarero o comensal lo mojen por accidente. Sin embargo, en atención a esto, fabricantes como Sony o Motorola empiezan a fabricar de serie teléfonos que cuentan con recubrimientos y sistemas de montaje que evitan que las salpicaduras dañen nuestros teléfono. Igual si pasa por la lavadora muere, pero un chapuzón accidental mientras comemos no debería acabar con ellos.

Megabaterías

Tras el título de este párrafo no se esconde un programa nuevo de Discovery Max (aunque podría perfectamente serlo…) sino que me gustaría destacar cómo algunos fabricantes están preparando teléfonos con características que mejoran notablemente la vida de sus terminales (como la tecnología Stamina de Sony o la gama MAXX de Motorola). Además, en el MWC hemos tenido la ocasión de ver como E-INK ha presentado un prototipo de teléfono Android que con una sola carga aguantaba una semana gracias a una pantalla de tinta electrónica. De acuerdo, la definición no es ni de lejos tan buena como en otros, ni el tiempo de refresco, pero realmente si pensamos en gente que lo vaya a usar para mensajería, correo electrónico y llamadas (que no son pocos), estaríamos hablando de un dispositivo que se ajusta mucho más a sus necesidades que la mayoría de los smartphones que hay en el mercado, pero con la ventaja añadida de la inmensa duración de las baterías. No obstante, como ya hemos dicho, parece haber fabricantes centrados ya en la mejora de las baterías sin que renunciemos por ello a ninguna prestación adicional, así que es cuestión de tiempo ver una mejora en este sentido.

Como veis, son dos cositas a las que hace unos años se les prestaba una enorme atención, pero que se han venido descuidando de un tiempo a esta parte y quizá estaría bien recuperar algunos para, como ya hemos comentado alguna vez, ofrecer un valor diferencial con respecto a otros fabricantes u otros productos y que nuestras máquinas tengan ese puntito extra que nos haría decantarnos por ellas.