La gama Nexus, los teléfonos de Facebook y los dispositivos de Amazon (sus Kindle y Kindle Fire) tienen una cosa en común. No son dispositivos al uso, aunque puedan parecerlo para un observador distraido. Si miramos con atención, parece que su modelo de negocio no se basa en obtener un beneficio del hardware, sino del software que está instalado dentro de ellos. No cabe duda de que varias webs han revolucionado nuestra forma de entender el mundo y que las redes sociales representan el mayor exponente en esta tendencia pero, ¿puede haber llegado el momento en que además revolucionen la forma de vender dispositivos?
Hasta ahora nuestros teléfonos y tablets se vendían o bien financiados de algún modo, o en modalidad libre, pero hay una opción que se nos escapa y que podría empezar a cobrar fuerza en un futuro no muy lejano: redes financiando o subvencionando móviles. Por redes no quiero quedarme solamente en las redes sociales, sino abrir un poco más la perspectiva e incluir servicios como Google (que aunque tenga Google+ ahora e intente centrar la atención de sus usuarios en ella, sigue sin ser el producto central de la compañía) o Amazon, el vórtice de mercancías competitivas en Internet, donde podemos encontrar de todo a buen precio (hay quien dice que originalmente era una librería online).
Y es que todos conocemos la gama de dispositivos Kindle, los lectores de Amazon y cómo desde siempre han estado entre los e-reader más competitivos del mercado. Además desde hace un tiempo la compañía de Jeff Bezos ha adaptado su oferta para incluir tablets con su propia versión de Android, incluyendo ofertas en la compra de aplicaciones e incluso ofreciendo algunas gratis. Todo esto sin tener que pagar los dinerales que otros fabricantes cobran por ello.
Por otra parte tenemos también a Google jugando un papel fundamental en todo este lio con su gama Nexus, teléfonos y tablets cuyo precio y características deberían hacer avergonzarse a más de un fabricante por ofrecer auténticas maravillas a precios más que competitivos. ¿El motivo de su bajo precio? Que los chicos de Mountain View no buscan un beneficio monetario de estos dispositivos, sino una expansión de sus servicios entre la mayor cantidad posible de usuarios y una plataforma de referencia para desarrolladores. Es decir, al igual que la gente de Amazon, los de Google no quieren ganar mucho ya, sino llegar a la mayor cantidad de gente posible.
Y ahora aparece un tercer contrincante, Facebook, que lleva un tiempo disfrutando del maravilloso beneficio que ofrece la publicidad segmentada (que, no lo olvidemos, es el principal negocio de Google). Todos los rumores apuntan a que la empresa de la f azul podría financiar parte o la totalidad del precio de algunos dispositivos en breve, para obtener ganancias después a base de la más que valiosa información que sus usuarios proporcionarían a las empresas anunciantes a través de los servicios de la red social.
Personalmente no me parece descabellado, estamos pasando de una situación en que las operadoras financiaban nuestros teléfonos a una en la que podrían hacerlo Google, Facebook o Amazon. Y la verdad es que si miramos en perspectiva la situación, en ambos casos, el proveedor del servicio que más usamos se encarga de que tengamos una herramienta para hacerlo.
Quizá suena a idea rara, pero entre lo que me he gastado en aplicaciones en Google Play y en libros en Amazon, creo que mi Nexus 7 y mi Kindle le han salido muuuuuy rentables a alguien…