Las marcas de dispositivos «tradicionales» han visto como en los últimos meses/años ha ido surgiendo una gran amenaza para sus ventas: los fabricantes chinos. Esto no es novedad hoy en día, desde China vemos como cada día se presentan nuevos smartphones, ya sea desde marcas conocidas y con reputación – como podrían ser Oppo, Xiaomi, Meizu, OnePlus, etc. – y otras totalmente desconocidas para la mayoría de la población. Estas últimas montan componentes «equilibrados» de gama media-baja, les meten Android (sin demasiadas esperanzas de recibir un soporte futuro) y los ponen a la venta con un precio realmente bajo, una cantidad con la que esas marcas «tradicionales» son incapaces de competir.
Claro, precios bajos y estética atractiva – que en muchos casos suelen ser idénticos a modelos conocidos – llaman la atención del usuario, pero la única forma de conseguir esos teléfonos a una cantidad baja, es comprarlos directamente en China, importándolos con todos los riesgos que eso conlleva. Sí, existen muchísimas tiendas reseller en Europa, que pueden ofrecer una mayor garantía, pero eso conlleva un extra en el precio que no siempre estamos dispuestos a pagar, nos gusta el riesgo.
Pese a que he hablado de terminales de gama media-baja, lo anterior es perfectamente aplicable a la gama alta, auténticos topes de gama que nacen en el país más poblado del planeta con precios de escándalo, sólo si los compras directamente allí a través de la red. Importar un smartphone (y en general cualquier cosa de valor) desde China supone riesgos: posibles problemas de aduana (te puede tocar, o no, es una lotería) y problemas posteriores, cuando ya tienes el teléfono y no es lo que esperabas.
Esta va a ser una entrada sobre una vivencia personal, mi experiencia tras comprar un smartphone barato en China y no salir todo lo bien que esperaba, pues finalmente llegó averiado y la solución para recuperar el dinero (que no el tiempo invertido) era devolver el producto a China.
Comprar teléfono en China: atractivo pero arriesgado
En mi caso, decidí regalar a un familiar un smartphone nuevo, no sería su primer teléfono con Android, pero sí mucho más moderno que su actual dispositivo. Al ser una persona que no utiliza el teléfono nada más que para llamar, tener breves conversaciones por WhatsApp y ver 2 vídeos en YouTube de uvas a peras, no pensaba hacer un gran desembolso por eso me decidí por el Doogee DG310.
Ya hemos hablado de esta marca en otras ocasiones y en concreto el modelo DG310 (también llamado Voyager2) tiene una pantalla de 5» (480×854), Mediateck QuadCore a 1.3GHz, 1GB RAM, 8GB de espacio +microSD, batería de 2200mAh y Android 4.4 KitKat. Sí, ya se que no es ninguna maravilla, pero para la persona a la que iba dirigido era perfecto. Además, tenía a su favor el precio, que tras hacer una breve búsqueda en Aliexpress, lo encontré por tan solo 68€.
Perfecto, me dije. No era la primera vez que compraba en Aliexpress y, como en cualquier compra a China, ya sea por eBay o por tiendas de este tipo, sólo hay que tener paciencia. El vendedor chino lo envió por correo ordinario y tras unas 3 semanas, ahí estaba el aviso en mi buzón. Esto no quiere decir que siempre ocurra así, puedes tener mala suerte y que te lo paren en aduanas, es una auténtica lotería, aunque normalmente se suelen marcar los paquetes como «regalos» y se declara un importe mucho menor de 10 o 15 dólares.
En fin, ya estaba el teléfono en casa, perfectamente protegido y demás, pero la sorpresa vino cuando al tenerlo cargando un buen rato, no encendía. En realidad más que no encender, era la pantalla la que no se inmutaba, ya que el panel LCD se iluminaba, el smartphone sonaba con el bootanimation, pero jamás llegaba a mostrar imagen en pantalla. Tras unas comprobaciones, tocaba ponerse en contacto con la tienda china en Aliexpress.
Antes de abrir una disputa, me puse en contacto amablemente con el vendedor, estuvimos intercambiando mensajes, pidiéndome pruebas como es habitual (fotos y vídeo del problema) y algunas recomendaciones para ver si por arte de magia el teléfono se encendía. Obviamente no fue así y yo quería mi dinero de vuelta, pero claro, antes había que devolver el smartphone a China.
La devolución de un smartphone a China desde España
En un primer momento puedes pensar, «uff qué pereza» y no es para menos, porque las cosas se complican cuando lees en distintos foros gente que ya ha tenido que hacer devoluciones de teléfonos y aparatos electrónicos a China. El principal problema está en la normativa que regula el envío internacional de dispositivos con baterías de litio.
Si entramos en la web de Correos, veremos el listado de objetos no permitidos en envíos internacionales y en concreto, dentro del apartado de mercancías peligrosas están las baterías de litio, el corazón de nuestros smartphones. Esto no es un capricho de Correos, sino que es normativa de la IATA, la Asociación Internacional de Transporte Aéreo (en inglés «International Air Transport Association») y por tanto, muchas otras compañías de transportes de pago también cumplen esas normas. Aquí tenéis la documentación completa.
Claro, esto es la teoría. Según pude leer por la red, ha habido usuarios que han enviado el paquete por Correos y directamente se lo han rechazado al indicar que contenía batería mientras que a otros se lo han permitido rellenando la «hoja verde de declaración«. Sin embargo, no todos los permitidos han llegado a su destino, ya que la gran mayoría acababan siendo retenidos al pasar por los escáneres de aduanas y devueltos al remitente.
Esto, por lo que he podido leer, es más lotería aún que la aduana de entrada en España, ya que usuarios han insistido varias veces tras ser devueltos y en una de ellas ha acabado colando. Ante ese panorama, mi caso no pintaba muy bien y ya dudaba si dar por perdidos los 68€ del teléfono (al menos no era cientos) y ahorrarme los calentamientos de cabeza.
Sin embargo, me encontré un hilo de HTCMania que me vendría de perlas. Allí, el usuario «alijo73» contó su experiencia con un caso similar, en el que tuvo que enviar dos Xiaomi Mi3 a China por rotura de pantalla. Claro en ese caso es más preocupante aun, que ese modelo tiene batería integrada e imposible de desmontar sin meterle mano. Lo realmente interesante llega cuando su vendedor chino le comentó sobre una empresa llamada RapidExpress (española), por la cual podría enviar los teléfonos.
Me puse a «investigar» un poquito por su web, parecía fiable, básicamente se trata de una empresa que gestiona envíos online, de forma seleccionamos el tamaño de paquete, destino y demás, te dice precio, pagas y al día siguiente tienes a un transportista en la puerta para recogerlo. El precio, por cierto, no era desorbitado, ya que en mi caso para un paquete de 20 x 13 x 7 cm y 500 gramos, me salía por menos de 20€ hasta China y con llegada en 3 días.
Antes de solicitar la recogida, quise llamar a RapidExpress para preguntar por el tema de las baterías, así como de los documentos que debía adjuntar. Según me comentaron, sí podía meter la batería en el paquete, PERO, separada del smartphone (algo que sigue sin tener solución para aquellos con ella integrada) y además, debía adjuntar el Albarán de confirmación, que podéis ver aquí (y que te mandan al confirmar el servicio) y la factura pro-forma/declaración de aduanas.
Documento imprescindible: factura proforma
Tema importante este último documento: la factura proforma. No se trata de tu factura de compra, sino que es una hoja en la que deberemos indicar los datos del remitente y del destinatario, así como una descripción del contenido del paquete, su peso, bultos y motivo del envío. Amablemente me enviaron un formulario tipo que aquí os dejo:
Ahora, ¿donde debo colocar la factura proforma? Según la chica que me atendió, debía adjuntar 5 copias con el paquete, al igual que el albarán. Lo que hice fue pegar un sobre en el exterior con las copias dentro.
¿Qué debo poner en la descripción del paquete?
Los chinos no son tontos y si ellos, cuando envían un paquete a Europa, declaran que es un regalo («gift») con un valor realmente reducido – siempre en torno a los 10$ -, es por algo. Como es normal, tuve que preguntar a mi «amigo» vendedor chino sus datos para rellenar la factura proforma y desde el primer momento me dejó bien claro que si quería que el paquete llegase a sus manos, debía mentir en la descripción y así evitar las aduanas, sobre todo las Chinas.
Así, me «recomendó» que si no quería tener problemas de aduanas, hiciese lo mismo. Total, que en mi paquete declaré que era un «Gift MP4», con un valor de 15$ y como razón del envío «Broken Screen» (que no era del todo mentira).
Listo, recogida solicitada, paquete bien protegido y en su exterior tanto el albarán como la factura proforma en varias copias debidamente completadas. Al día siguiente, llegó el transportista, en este caso de TNT le entregué el paquete y, muy importante, una de las copias del albarán y la factura es para él y otra, sellada, para mi.
Ya sólo quedaba esperar… y comprobar como un loco el número de seguimiento del paquete. Aquí está el resultado:
Perfectamente entregado, de Alicante (España) a Shenzhen (China) en tres días y pasando por las aduanas de ambos países satisfactoriamente y con batería incluida en el paquete.
Esto no quiere decir que no haya otras formas de enviarlo, como he comentado anteriormente hay usuarios que lo han conseguido a través de Correos y estoy seguro que mediante otras agencias de transporte también sería posible, pero esta ha sido mi experiencia, por suerte satisfactoria. Podría haber salido mal y comerme el paquete de vuelta, pero es lo que tiene arriesgarse a comprar en China y que te salga un producto defectuoso.
Por desgracia es cada vez más normal que hagamos compras por la red en la otra parte del mundo y en este caso eran «sólo» 68€, pero el valor podría ser mucho más alto si hablamos de un terminal de gama alta Xiaomi, Meizu o cualquier otro. Lo mismo si nos referimos a cualquier aparato electrónico, desde una tablet a una cámara de fotos, puede salirnos más barato, sí, pero si nos sale rana toca devolución (o pagar reparación en España).
En fin, espero que esto pueda servir de ayuda a aquellos que se encuentren con mi situación, pero eso sí, no es una guía infalible. Y vosotros, ¿habéis tenido que hacer algo similar? No dudéis en contar vuestras experiencias en los comentarios, seguro que pueden ayudar a otras personas.